De ser aprobada por la ciudadanía, la Carta Magna dirá que el país trasandino “es un Estado social y democrático de derecho, plurinacional, intercultural y ecológico”.
Gabriel Boric, presidente de Chile |
AFP
Jorge Elias
De ser aprobada por la ciudadanía, la nueva Constitución de Chiledirá que el país trasandino “es un Estado social y democrático de derecho, plurinacional, intercultural y ecológico”.
La Convención Constitucional, surgida de las revueltas de 2019, contra el texto heredado de los años de plomo de Pinochet, incluye por primera vez paridad entre hombres y mujeres como así también escaños reservados para los pueblos originarios. Esta convención fue elegida entre 15 y el 16 de mayo de 2021 tras ser convocada por medio del plebiscito del 25 de octubre de 2020. La modificación obtuvo 114 votos a favor, 26 en contra y 10 abstenciones.
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Una de sus premisas es reemplazar la figura de Estado subsidiario, que figura en la actual Constitución. El primer artículo de la nueva Constitución dice textualmente: “La protección y garantía de los derechos humanos individuales y colectivos son fundamento del Estado (...) Es deber del Estado generar las condiciones necesarias y proveer los bienes y servicios para asegurar el igual goce de los derechos”.
Los chilenos deberán decidirlo en un referéndum con voto obligatorio, previsto para el 4 de septiembre. En resumen, Estado igualitario en lugar de Estado subsidiario.
