Si el país se encontraba en medio de una amenaza elevada, las elecciones de medio término, la polémica por la derogación del aborto y la creciente ola de inmigrantes son factores que pueden empeorar la situación. Eso supone, en medio de un ambiente enrarecido por la ola de tiroteos, el eventual aumento de acontecimientos de gran repercusión que podrían ser aprovechados para justificar actos de violencia.
El llamado de atención del gobierno norteamericano vaticina un aumento del extremismo doméstico, lo cual representa un cambio respecto de las alertas sobre el terrorismo internacional. Un clásico, acaso una señal de identidad, de la agencia desde su creación, por orden de George W. Bush, después de los atentados del 11 de septiembre de 2001.
"Locos por las armas: otro ataque callejero deja tres muertos y 11 heridos, esta vez en Filadelfia"
Polarización y terrorismo
El enemigo no viene de afuera. Está dentro. Y se vale del clima encrespado de enorme polarización política creado, sobre todo, durante el gobierno de Donald Trump. En el boletín anterior, la agencia mencionaba amenazas provenientes del exterior. Señalaba a miembros de Al-Qaeda que habían celebrado en enero un enfrentamiento en una sinagoga de Colleyville, Texas. También indicaba que el Daesh, ISIS o Estado Islámico había llamado a los suyos para realizar ataques en Estados Unidos en venganza por los asesinatos del líder y el vocero.
En este nuevo boletín, en vigor hasta el 30 de noviembre, advierte sobre el interés de China, Rusia, Irán y otras naciones en fomentar las divisiones dentro de Estados Unidos para debilitarlo por medio de teorías de conspiración e informes falsos. Cita a un hombre blanco que mató a 10 afroamericanos en un supermercado de Buffalo, Nueva York, en mayo, antes de la masacre de 19 estudiantes y dos docentes en la escuela primaria de Uvalde, Texas. Punto de partida para la discusión sobre la portación y el uso de armas de fuego en la sociedad.
CB PAR