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MODO FONTEVECCHIA
El editorial de Jorge Fontevecchia

Día 563: ¿El auge de la extrema derecha empieza a generar reacción?

Los buenos resultados del socialista Zohran Mamdani en Nueva York, la comunista Jeanette Jara en Chile y el candidato peronista Juan Monteverde en Rosario dan un indicio de renovación. ¿Tomará nota el resto del sistema político?

Zohran Mamdani, Jeannette Jara y Juan Monteverde
Zohran Mamdani, Jeannette Jara y Juan Monteverde | CEDOC

Frente a la crisis del capitalismo a nivel mundial, la sociedad reacciona de diferentes maneras. Hasta ahora, el fenómeno más importante es el auge de la extrema derecha. Figuras como Donald Trump, Viktor Orbán y Javier Milei encuentran en la clase política progresista, los inmigrantes y los adversarios políticos el depositario de todos los males del mundo y se presentan como líderes mesiánicos que vienen a salvar a la gente de a pie de los problemas generados por el sistema político tradicional.

Pero también hay otras reacciones. Otro sector de la sociedad ha optado por la indiferencia. Cada vez más, en nuestro país y a nivel internacional, crece el ausentismo electoral y la despolitización de buena parte de los ciudadanos que prefieren no meterse en los asuntos públicos para resguardarse en la vida privada.

Sin embargo, con los buenos resultados en las elecciones internas del candidato socialista Zohran Mamdani en Nueva York, de la comunista Jeanette Jara en la interna oficialista chilena y del candidato a concejal rosarino, Juan Monteverde, dan un primer indicio de que tal vez, haya un nuevo fenómeno de respuesta social a la crisis: el de emergente de izquierda que representan una renovación de la política. Esto analizaremos en esta columna de Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio JAI (FM 96.3).

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Hay algunos puntos en común: ninguno es un outsider y todos tienen perfiles militantes y activistas. En el caso de Mamdani, empezó militando en el barrio neoyorquino de Queens, de clase media, contra los desalojos por las crisis de las hipotecas. Luego llegó al Partido Demócrata y milita en su ala izquierda, Socialistas Democráticos de América (Democratic Socialist of America). Desde este sector viene trabajando para reorientar a los demócratas con una propuesta progresista y socialista.

Jeanette Jara fue activista desde el colegio secundario, años en los que fue presidenta del Centro de Estudiantes. Luego fue funcionaria de los gobiernos de Bachelet y de Boric. Siempre fue una cara visible del Partido Comunista de Chile.

Juan Monteverde empezó a militar a los 20 años en el barrio Nuevo Alberdi de Rosario y luego creó el partido Ciudad Futura que reunía militancias de cooperativas, trabajo social barrial, proyectos de autogestión cultural y de bachilleratos populares. Desde esta plataforma empezó a crecer y luego tejió una alianza con el PJ local.

Los tres moderaron sus discursos y se enfocaron en ejes concretos de campaña. Sea el tema de las pensiones en Chile, los precios de los alquileres en Nueva York o la inseguridad y el problema del transporte en Rosario. Sus campañas estuvieron siempre cerca de los problemas de la sociedad.

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Por otro lado, los tres se aliaron con espacios más amplios para aprovechar el volumen electoral de otros y pelear desde adentro de coaliciones electorales con el objetivo de avanzar sobre las alas más moderadas. Es decir, si efectivamente consideramos que este tipo de candidaturas son una respuesta al auge de la extrema derecha, no resulta una respuesta en espejo.

No son outsiders de izquierda que plantean propuestas radicalizadas y que representan un rechazo a todo el sistema político. Son militantes con años de formación que tejen pacientemente sus alianzas para alcanzar las mayorías necesarias.

Zohran Mamdani nació en Kampala, la capital de Uganda, en 1991 y es socialista y musulmán. El pasado 24 de junio le ganó la interna al exgobernador estatal Andrew Cuomo en las elecciones primarias del Partido Demócrata para la Alcaldía de Nueva York.

Con el lema “Por una Nueva York que puedas costear”, propone el acceso a transporte público gratuito, congelamientos de alquileres y nuevas viviendas accesibles, a partir del aumento de impuestos a los más ricos.

Estudió en el Bronx High School of Science y más tarde se licenció en Estudios Africanos en el Bowdoin College, donde cofundó la sección universitaria de Estudiantes por la Justicia en Palestina. Mamdani además participó de varias de las movilizaciones contra la intervención de Estados Unidos en Medio Oriente.

Zohran Mamdani
Zohran Mamdani será el candidato demócrata a la alcaldía de la ciudad de Nueva York en las elecciones del 4 de noviembre.

Después de las primarias demócratas y en medio de la polarización que vive Estados Unidos, Donald Trump arremetió contra Mamdani en redes sociales. El presidente aseguró que los demócratas “se pasaron de la raya” y que el candidato es “un lunático comunista”.

En un spot en español, el mismo Mamdani dijo: “Fíjense. Nadie sabe pronunciar mi apellido. Es Mamdani, pero a cada rato me dicen Mundani o Mundari. Esto es algo que muchos inmigrantes tenemos en común, y no me molesta. Así somos nosotros, la gente de Nueva York: siempre hacemos todo lo que podemos”.

Pero en estos días, por mucho que trabaje uno, la vida en esta ciudad es carísima, sobre todo para los latinos. Más de la mitad de las familias latinas no pueden pagar la renta, y casi el mismo número está pensando en dejar la ciudad. Mientras tanto, Eric Adams nos ha aumentado la renta, y Cuomo hará lo mismo. Lo sabemos porque en este momento está aceptando el dinero de los dueños de edificios multimillonarios”, declaró.

Es increíble que sea elegido en Nueva York un musulmán en medio del conflicto en Medio Oriente, y que además se define socialista y nació en Uganda, en el centro del África más pobre. Evidentemente hay una parte importante de los estadounidenses que no está de acuerdo en el relato oficial en relación con la guerra. Ahora, vamos a un video que presenta a Jeannette Jara.

Jeanette Jara estuvo ligada a la política desde muy joven. Trabajó 14 años en el Servicio de Impuestos Internos, y fue secretaria de Previsión Social durante el segundo gobierno de Michelle Bachelet. En enero de 2022, Boric la designó ministra de Trabajo y logró la histórica aprobación de la reforma del sistema mixto previsional. Jara celebró el triunfo bailando cumbia en la ceremonia oficial.

Jeannette Jara
Jeannette Jara, candidata del Partido Comunista, triunfo en las primarias presidenciales del progresismo.

En un spot de campaña de la interna oficialista, Jara declaró: “No vengo de la elite, sino de un Chile que se levanta temprano para trabajar. Necesitamos que Chile sea diferente, que sea más justo”.

Jara no radicaliza su propuesta, le alcanza con presentarse como alguien de la clase trabajadora, en oposición al resto de los políticos que como mínimo vienen de la clase media alta.

Ahora analicemos el spot de Juan Monteverde, también totalmente pegado a la agenda de los problemas locales. “Siempre lo mismo. Otra vez nos quieren hacer elegir entre los que destruyeron la ciudad y los que rompen lo poco que nos queda. Hagamos que esta vez no sea lo mismo de siempre”, señaló.

Luego de su triunfo, Monteverde dijo: “En Rosario ganó una fuerza muy plural y diversa que contiene a casi todos los sectores del peronismo, del Frente Progresista y nosotros, que venimos de Ciudad Futura, un partido independiente que viene de los movimientos sociales”.

Juan Monteverde
El candidato del peronismo, Juan Monteverde, ganó las elecciones de concejales de Rosario.

Evidentemente, este tipo de resultados, completamente impensados en otras circunstancias, algo tienen que ver con el auge de la extrema derecha y estos políticos si bien están en el extremo izquierdo del sistema político, no sobreactúan sus formas ni colaboran con el clima de enfrentamientos e insultos. La reacción de una parte de la sociedad, todavía minoritaria y fragmentaria no es en espejo. No son Mileis de izquierda, por decirlo de algún modo. ¿Tomará nota el resto del sistema político y se renovará o esperarán que estos nuevos candidatos empiecen a brotar en todos lados?

Es interesante pensar en ese sentido en la imagen del gobernador bonaerense, Axel Kicillof. ¿Tiene que ver con este proceso? ¿Podríamos ubicarlo como una suerte de Monteverde porteño y ahora bonaerense? Su militancia empezó por fuera del aparato del PJ y tiene un acuerdo electoral con el peronismo, pero, por lo pronto, parece ser su propio dirigente.

¿Será visto por el resto de la sociedad como una renovación de sistema político o su cercanía a Cristina Kirchner y sus dos mandatos como gobernador lo habrán desgastado? Preguntas que tendremos que seguir analizando y responderá el tiempo. Por lo pronto, estas elecciones, le dan insumo para animarse a profundizar su camino.

Si bien estos resultados son interesantes, hubo otros síntomas parecidos. Alexandria Ocasio Cortez, también en Nueva York, resultó un fenómeno mediático y electoral, que luego se diluyó tras algunas derrotas parlamentarias y campañas de desprestigio. Además, Trump, con su discurso industrialista y proteccionista, logró representar a buena parte de la clase obrera estadounidense. Como Milei, que captó votos de los sectores menos beneficiados, que normalmente votaban al peronismo.

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Volvamos a Nueva York. ¿Qué pasó con Cortez? La política funciona como un juego dinámico de acción y reacción donde cada iniciativa genera respuestas que moldean su resultado. Como señala Giovanni Sartori, “cada movimiento estratégico de un actor político provoca una respuesta de otro, generando un ciclo continuo de interacciones”. Así, toda acción política —ya sea una protesta social, una reforma o una campaña— provoca reacciones diversas: resistencia, adaptación, represión o cooptación, que a su vez condicionan nuevas acciones en un proceso que es continuo y nunca para.

Charles Tilly enfatiza que estas reacciones no son simples respuestas automáticas, sino procesos complejos donde el poder se negocia y se reconfigura: “Las repercusiones de una acción política implican procesos de negociación que pueden neutralizar o transformar la iniciativa original”. Esta dialéctica entre acción y reacción refleja la tensión inherente al conflicto social, como planteó Ralf Dahrendorf, quien explicó que la lucha entre grupos con intereses opuestos produce ciclos que oscilan entre la transformación y la conservación del statu quo.

Es decir, no solo se trata de representar una reacción frente al avance de la extrema derecha. Luego hay que poder conducir esa reacción y hacerla efectiva. Las negociaciones y moderaciones a veces sirven para poder concretar las propuestas y otras veces hacen que los dirigentes sean asimilados totalmente al status quo, perdiendo la representatividad.

El exvicepresidente de Bolivia Álvaro García Linera dice que el progresismo tiene una sola forma de sobrevivir: avanzar. Necesita mejorar constantemente la vida de la gente, no puede detenerse. Linera dice “es una ley injusta de la historia”, porque lo mismo no se le pide a los conservadores. Entonces, si estas opciones no generan cambios concretos, tienden a diluirse rápidamente. Estos resultados pueden empezar a dar cuenta de que crece una reacción a la extrema derecha mundial.

Producción de texto e imágenes: Matías Rodríguez Ghrimoldi

TV/ff