¿Tiene “cara chica” o “cara grande”?, es la pregunta del momento y refiere a los distintos billetes de dólar disponibles para la compra venta. Desde hace un tiempo ya, en el mercado cambiario informal de la City porteña, hay distintos tipos de billetes según el año de emisión. Lo llamativo es que sin un fundamento legal concreto, unos valen más que otros.
Tras reanudar las operaciones con el dólar “blue”, en el mundo de las conocidas “cuevas” y “arbolitos”, también se reavivaron las dudas sobre la validez de algunos billetes.
Las tres caras de un mismo Franklin
Por un lado, en el caso del dólar "cara chica", es el billete de USD 100 emitido entre 1914 y hasta 1996. El diseño tiene la imagen de Benjamin Franklin, en un marco ovalado pequeño.
Por el otro, en emisiones posteriores, apareció el billete “dólar cara grande”, impreso desde 1996 y hasta 2013. Con un cambio en las dimensiones: el retrato de Franklin es notoriamente más grande, con un marco que se orilla a los bordes del billete.
Desde 2013 a la actualidad, tomaron protagonismo “los azules”. Estos billetes ganaron espacio en el mercado cambiario y su nombre responde a la banda de seguridad azul en 3-D que los atraviesa. En esta última versión, la imagen del científico de la cometa y la llave, ya no tiene un marco ovalado.
Entre otras marcas características para evitar falsificaciones, este billete además tiene hilo de seguridad, marca de agua y tinta que cambia de color.
Lo cierto, es que en la práctica estos billetes no solo tienen diferencias de diseño sino además en el valor que se recibe al venderlos.
Por los dólares “cara chica”, si bien es un diseño antiguo pero legal, las “cuevas” llegan a pagar entre un 2 % y hasta 4% menos y los ahorristas los rechazan. Ello se debe a que sería más difícil poder “moverlos” e insertarlos al mercado.
Por este motivo, al momento de comprar los argentinos van a las casas de cambio y piden directamente por "los azules", el diseño de dólar más reciente que emitió la Reserva Federal (FED).
Qatar encendió las alarmas del mercado cambiario
Es conocido que las “cuevas” porteñas pagan menos por los billetes antiguos y también aceptan venderlos a bajo precio. Si bien la preferencia por los billetes azules se registra desde hace años, ahora se vio acentuada por el efecto Qatar.
La alarma se activó cuando los viajeros empezaron a advertir que las versiones “cara chica” de los billetes no están siendo aceptadas en el exterior.
Según informó el portal de noticias Aire de Santa Fe, muchos argentinos que viajaron a la sede mundialista de Qatar, no pueden “intercambiar la moneda por la divisa local”, por no tener las "últimas" versiones emitidas desde 2013.
De este modo, varios locales qataríes rechazan "sin excepciones" los billetes de diseño viejo. Por su parte, las casas de cambio en Argentina sintieron el efecto mundialista, porque la gente solicita específicamente "el diseño azulado" para evitar complicaciones y futuros rechazos.
Cabe recordar, que la FED había anunciado en 2013, que es política del gobierno de Estados Unidos que todos los diseños de dólar tienen el mismo curso legal, independientemente del año de emisión.
Sin embargo, muchas casas cambistas del exterior están rechazando los billetes antiguos, tanto en su versión "cara chica", pero también el "cara grande" sin banda azul.
Qué hacer con los billetes versión vieja
Vivir la experiencia de un Mundial en Qatar o viajar por vacaciones son emociones que merecen disfrutarse a pleno sin mayores complicaciones. Es claro que todos los billetes de 100 dólares son válidos, pero a efectos de evitarse malos momentos, los viajeros pueden hacer el cambio de sus billetes antiguos.
Por un lado, pueden depositarlos en su banco para luego retirarlos. Eso sin mayores problemas, ya que las entidades están obligadas a aceptar toda moneda de curso legal.
Otra opción es intentar el cambio en alguno de los países donde los billetes de emisión antigua sean aceptados. Y una vez con “los azules” en mano a disfrutar de viajar.
BL PAR