La relación de Claudio Lozano con el resto del Frente de Todos fue casi una telenovela desde que arrancó la gestión. Las constantes críticas públicas del ahora ex director del Banco Nación, hacia el Presidente y hacia la política económica, ocasionaban broncas constantes en el oficialismo.
Varias veces funcionarios topes del Gobierno le habían pedido en público su renuncia, pero esta recién terminó de llegar en la noche del martes 9. Aunque fue Silvina Batakis, la ahora presidenta de esa entidad que arrastra una pésima relación con Lozano, la que exigió que se vaya, Alberto Fernández tuvo un rol clave y desconocido.
El encontronazo de Alberto Fernández con un ex ministro
Es que cuando, en la tarde de ese martes, Lozano recibió un llamado de una de las manos derechas de Vilma Ibarra, el hombre no lo quería creer. Estaba en su despacho y ante la información que llegaba del otro lado del teléfono, que le decía que tenía que dejar su puesto, Lozano desconfió. Cortó la conversación diciendo que iba a chequearlo con Presidencia a ver si era cierto. Por eso su sorpresa fue grande cuando logró hablar con Julio Vitobello, el secretario general del Presidente.
Claudio Lozano: "Batakis fue un papelón en Economía y otro al asumir en el Banco”
Es que en esa charla el funcionario que acompaña día a día a Fernández le confirmó que esa era, antes que todo, una decisión del propio Alberto. El Presidente, quizás como un gesto para volver a mostrar autoridad luego de los últimos cambios en el Gobierno, fue quien ordenó que se vaya Lozano. En la Casa Rosada arrastraban bronca con él no sólo por las constantes críticas sino por su posición sobre el acuerdo con el FMI, al que se opuso en público. Movió Alberto y Lozano tuvo jaque mate.
JL PAR