OPINIóN
Universidad de Belgrano

El rol de los profesionales de Biología en el mundo global

El biólogo ya no es sólo el científico aislado de la sociedad, con la mirada fija en su microscopio. La Resolución 2687/23 del Ministerio de Educación y el CONEAU fija los nuevos estándares de acreditación para el ejercicio de esta profesión. Cuáles serán los nuevos desafíos.

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Ellas. Únicamente en tres países de la región la mitad de quienes hacen investigación son mujeres. | gza. conicet


La Biología, como aprendimos en la escuela, es la ciencia madre que estudia la vida en todas sus formas, desde bacterias hasta yaguaretés, plantas u hongos. Estudiamos las partes de las células casi como un mantra, definimos factores abióticos y bióticos y las bases de la salud humana. Algunos fuimos más allá, nos apasionamos y emprendimos la formación superior en este campo.

A lo largo de la historia, pensadores, filósofos y científicos han explorado el origen y funcionamiento de los seres vivos. Desde Aristóteles hasta Darwin y con el avance tecnológico aplicado a las investigaciones, la biología ha evolucionado, convirtiéndose en la base de disciplinas como la medicina, la genética y la biotecnología.

El art. 43 de la Ley de Educación Superior de la República Argentina dispone los lineamientos sobre la formación universitaria de aquellas carreras cuyo ejercicio pudiera comprometer el interés público. Bajo esa órbita, las actividades reservadas a los profesionales de la Biología se encuentran reguladas por el estado nacional. Recientemente, el Ministerio de Educación junto con la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU) por Resolución 2687/23 han fijado los nuevos estándares de acreditación para el ejercicio de esta profesión en consonancia con el contexto regional e internacional.

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En Argentina, existen 30 universidades que imparten la Licenciatura en Ciencias Biológicas, de las cuales sólo 5 son de gestión privada. Todas, en el plazo de un año deberán actualizar sus planes de estudio para lograr alta competitividad de sus graduados y asegurar la inserción laboral en un contexto global de continuo cambio.

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El biólogo ya no es sólo el científico con su microscopio aislado de la sociedad. La importancia del biólogo se ha revalorizado desde la última pandemia COVID poniendo en juego la relevancia de sus investigaciones aplicadas al campo de la salud. El profesional de la Biología asume desafíos que van desde identificación de moléculas en un tubo de ensayo hasta las bases ecológicas y demográficas del calentamiento global atravesando un mar de subdisciplinas emergentes.

Un graduado en Biología deberá disponer de las herramientas necesarias para desarrollarse en cualquier campo profesional ya sea del ámbito público o privado, en la investigación básica o aplicada, en el desarrollo científico y tecnológico en centros de investigación, empresas, industrias y laboratorios privados, en las ramas de genética y biomedicina hasta reproducción humana.

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Es vital la acción de los profesionales de biología en las áreas ecológicas relacionadas con la protección y conservación de la naturaleza, optimización de los cultivos de vegetales, animales y hongos, así como el desarrollo de nuevos biomateriales o incluso su accionar como peritos judiciales.

La diversidad biológica se correlaciona con las constantes y nuevas demandas del medio que requieren de intervenciones adecuadas de organización, planificación y monitoreo de los procesos biológicos tanto in situ como ex situ.

En este contexto urge adecuar los contenidos curriculares básicos, organizados en los ejes teóricos y en especial, en las habilidades prácticas, indispensables para el correcto ejercicio de las Actividades Reservadas al título, pero sin perder la autonomía de cada institución universitaria y su propia impronta académica.

El desafío consistirá en dilucidar qué tipo de profesionales necesitamos según el contexto actual. La dicotomía será entre especialistas por áreas o en graduados integrales con flexibilidad para adaptarse a los cambios presentes y futuros. La historia evidencia la evolución de las disciplinas y la generación de nuevas, quizás inimaginables hoy, en un loop dinámico.

El énfasis estará en alcanzar un rango de equilibrio entre la innovación y vinculación tecnológica y empresarial preservando el medio ambiente, legado invaluable a las futuras generaciones.

*Docente y Directora de la Lic. En Ciencias Biológicas de la Universidad de Belgrano