En este 2021, año en el que nuestro partido, La Unión Cívica Radical, cumplió 130 años de vida, la realidad nos impone nuevos, y cada vez, más eminentes desafíos.
A lo largo de 13 décadas hemos sido el único espacio político capaz de mantener el compromiso democrático, lejos de los gobiernos dictatoriales, de los personajes nefastos que golpeaban las puertas de los cuarteles. Lejos de la oligarquía sectaria y del populismo de un Estado clientelista. Fuimos el partido que gestó y promovió un juicio histórico al que no debemos ubicarlo “debajo de Nuremberg”, pues, muy por el contrario, aquí se juzgó y se condenó a los genocidas en tiempos que el sector castrense mantenía aún un importante poder y un cierto acerbo en una parte de la sociedad. De los medios hegemónicos de entonces también. No olvidemos.
Somos la Unión Cívica Radical de los presidentes intachables, de Hipólito, del Doctor Illia, del querido Raúl (“El nono”). Los presidentes de la honestidad, el trabajo y la producción. Somos los que democratizamos las Universidades, somos la juventud reformista que llenó los claustros de libre pensamiento e inclusión. Somos esos militantes que persiguió, desmadradamente, el peronismo y el totalitarismo.
Somos todo eso, y somos también los que sumamos nuevos actores para seguir construyendo un espacio de debate, de respeto y de sabiduría. Y en este escenario, hoy tenemos junto a nosotros a Facundo Manes. Su trayectoria, su sabiduría, su don de gente lo hace un valor fundamental que viene a dar aire fresco a la política nacional. En tiempos en que los bolsos llenos de dólares se revolean en Conventos, que la plata se cuenta en cuevas de Puerto Madero y que los Planes sociales funcionan como fábricas de cooptación de personas vulnerables. Ahí, es donde el radicalismo vuelve a dar muestras de qué lado elige estar. Porque abrazamos la política para darle respuestas a la gente, no a los políticos.
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Y en esta apertura, en la cual el radicalismo siempre dio sobradas muestras y ejemplos, es auspicioso ver la gran cantidad de mujeres que día a día se acercan a nuestro espacio con inquietudes, con expectativas, con proyectos. Siempre acompañamos y apoyamos las políticas de género, sin importar autorías ni “marcas registradas”. Trabajamos por una política con verdadera perspectiva de género. Nos interpela los temas trascendentes que rige nuestro ideario colectivo. En nuestro partido no hablamos de “cupos”, hablamos de valores, de capacidades, de inclusión.
Pero fundamentalmente nunca hacemos bandería política de todas y cada una de las conquistas sociales, porque las conquistas son de la gente, no de los dirigentes.
Después de 130 años, nuestro mejor legado es saber que cuando decís “soy radical” el pecho se nos infla, la sonrisa se nos ensancha y el corazón se nos hace grande.
*Senadora provincial por la Quinta Sección Electoral y Militante de la Unión Cívica Radical.