Con un informe preliminar de ADN y el testimonio de un peluquero, peritos de la Policía Federal acudieron el viernes al edificio de Ravignani 2360 en busca de una aspiradora con la que Jorge Mangeri habría limpiado rastros del ataque a Angeles Rawson. La aspiradora fue hallada en la terraza del edificio. La última pista analizada por el juez Javier Ríos apunta al testimonio aportado por un peluquero vecino a Ravignani, quien declaró que Mangeri le había pedido a una vecina que guardara una aspiradora.
El testigo relató que cuatro días después del crimen de Angeles, el portero lo fue a ver y tras decirle que estaba amenazado, le pidió que le entregara una nota a una vecina del séptimo piso en la que decía: “Sra. Sofía ponga la aspiradora en su lugar”.
Voceros consultados dijeron que anoche también fue allanado el domicilio de Mangeri, donde fueron encontrados rastros genéticos de Angeles que llevan a los investigadores a pensar que es posible que ese lugar haya sido la escena del crimen.
Según trascendió ayer, los fluidos biológicos de la adolescente asesinada, mezclados con los de Mangeri, fueron detectados con luz ultravioleta y luminol por peritos de la Policía Federal en una biblioteca del departamento del portero.