Los primeros resultados de la autopsia al cuerpo de Araceli Fulles, la joven de 22 años que fue hallada sin vida el jueves, enterrada en una casa de José León Suárez, determinaron que la víctima sufrió un estrangulamiento a lazo. Esa fue una de las conclusiones a las llegaron los peritos a cargo de la prueba en la morgue del Hospital Ramón Carrillo.
La familia de la chica reconoció este viernes que el cadáver encontrado anoche en una casa de esa localidad bonaerense en el partido de San Martín, corresponde a la mujer que estaba desaparecida desde el 2 de abril.
"El cuerpo es de ella", lamentó Ricardo Fulles ante los periodistas, al salir de la morgue luego de haber estado con la fiscal Graciela López Pereyra que le había podido confirmar si efectivamente el cadáver era de su hija, según consignó la agencia DyN.
El hombre se quejó de la investigación realizada por la funcionaria judicial de la causa: "Esto no se termina acá, porque ahora van a venir muchas cosas que se hicieron mal. La fiscal no sabe donde está parada. No se hizo lo que se tenía que hacer de entrada. Hasta cierto punto estuvimos solos".
Esta mañana, tres oficiales de la Policía Bonaerense fueron desafectados de la fuerza por la Auditoría General de Asuntos Internos en el marco de las investigaciones del caso. Se trata del subcomisario Hernán Humbert, titular de la comisaría octava de San Martín; del oficial principal José Gabriel Herlein, numerario de la comisaría quinta de San Martín; y del oficial subinspector Elián Ismael Ávalos, integrante del Comando de Patrullas de Tres de Febrero.
Ávalos es hermano de dos de los cuatro detenidos por la misma causa -Jonathan y Emanuel-, por lo que se lo separó preventivamente, mientras que los otros dos agentes estaban a cargo del rastrillaje para buscar a la joven.
En ese contexto, las fuerzas de seguridad aún buscan dar con el paradero de Darío Gastón Badaracco, de 29 años, que vive en la casa donde hallaron los restos de Araceli.
