Una mujer de 90 años fue asesinada en su casa de San Isidro y la investigación sigue la pista de su hijo. El giro se dio luego de que él mismo relatara que se había tratado de un robo, pero la cámara de seguridad de un vecino lo desmintió.
El hecho tomó trascendencia a partir del miércoles por la noche, cuando Aldo Di Paola, de 65 años, llamó a las fuerzas de seguridad para informar dos cosas: su madre María Cristina De Vicentis estaba muerta, con un cuchillo clavado en la cabeza, y el motivo aparentaba ser un robo de joyas y dinero.
Hasta allí el relato de la primera persona que vio a la anciana muerta. Sin embargo, para la Justicia quedaban puntos sin resolver y comenzaron las investigaciones.
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La prueba que compromete al hijo de la anciana asesinada
La recopilación de pruebas llevó a un elemento que puede resultar fundamental: la cámara de seguridad de un vecino que muestra la única puerta de entrada y salida de la casa. De acuerdo con los registros, la versión de Di Paola comenzó a flaquear.
Allí se lo ve ingresando a la casa de su madre el lunes por la tarde, cuando había relatado que su último ingreso había sido el domingo. Incluso es la única persona que entra y sale en los días donde ocurrió el hecho.
La muerte de De Vicentis, según los datos preliminares de la autopsia, habría ocurrido entre 48 y 72 horas antes del miércoles. Esas fechas coinciden con los ingresos de Di Paola según lo relatado por Martín Candalaft en Infobae.
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Respecto al robo que denunció se encontraron cajones abiertos y habitaciones desordenadas. Sin embargo, no había rastros de puertas u otros lugares de ingreso forzadas. Como la cámara no capta a nadie más que el hijo de la víctima saliendo del domicilio, se cree que pudo ser el autor. Además, en una de las imágenes se lo ve con una bolsa en la mano.
Por todos estos motivos la fiscal Carolina Asprella decidió detener a Di Paola 24 horas después del macabro hallazgo de su madre.
Parte de las preguntas que se hace la fiscalía es por qué un supuesto ladrón asesinaría de esa manera a una mujer que no podía caminar. Otra es saber cómo entró, teniendo en cuenta que no había signos de rotura en ningún acceso.
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Los investigadores continúan analizando las imágenes de la cámara para buscar más fundamentos que reconstruyan el hecho. Di Paola terminó allanado y detenido para ser trasladado a a la DDI de San Isidro.
Luego se le tomara declaración indagatoria para plantearle los puntos que tensionan con su relato. A partir de eso, el juez Ricardo Costa decidirá si las pruebas son determinantes para confirmar su detención.
GI/ff