La esposa, la suegra, el abogado y otros familiares del detenido Mario Segovia fueron detenidos hoy en una treintena de allanamientos realizados en la ciudad de Rosario, luego de que la Justicia comprobara que el llamado "rey de la efedrina" habría seguido vendiendo metanfetaminas desde la prisión.
Se cree que, ante las limitaciones impuestas a la importación de efedrina, Segovia se las habría ingeniado desde la cárcel para fabricar "efedrina sintética", una droga explosiva que "en solo tres meses puede destruir a un consumidor", dijeron las fuentes consultadas por la agencia DyN.
Las detenciones fueron dispuestas por el juez federal de Zárate-Campana Federico Faggionato Márquez, quien la semana pasada logró sortear un pedido de juicio político en el Consejo de la Magistratura.
Hoy, pese al feriado por el Día de la Raza, Faggionato Márquez encabezó un megaoperativo en Rosario y sus alrededores que incluyó el allanamiento a casi una treintena de viviendas y oficinas, y la participación de unos 200 efectivos de la provincia de Buenos Aires y de Rosario.
Las sospechas surgieron luego de que se descubrió que Segovia era uno de los presos "vip" de Ezeiza que contaba con teléfono celular y conexión a Internet desde una de las celdas que ocupaba.
A raíz de las distintas diligencias y procedimientos realizados desde la madrugada de hoy, fueron detenidas ocho personas, entre las cuales estaba Giselle Ortega, la pareja de Segovia que ya había sido arrestada por unas horas en noviembre último.
También fue arrestada la suegra y otros allegados de Segovia, entre ellos un abogado. Los investigadores buscan a otras cinco personas que están prófugas en la causa.
