Diciembre del 2015 no fue un mes más para los hermanos Lanatta. En prisión recibieron un mensaje intimidatorio que les resultó veraz: “Del 15 de enero no pasan”. Sus cabezas tenían precio. Es lo que asegura, en diálogo con Perfil.com, uno de sus abogados, Humberto Próspero. En el entorno de los condenados como autores del triple crimen de General Rodríguez aseguran que “están jugados y van a hablar, hay que ver si la justicia se anima a escucharlos”. Según uno de sus confidentes, “Martín Lanatta guarda en una caja bajo siete llaves pruebas de todo lo que declarará”.
En este momento, los condenados están aguardando la decisión del juez Sergio Torres de citarlos a declarar por la supuesta fuga que protagonizaron a comienzos de este año. “No se puede investigar el triple crimen, la fuga y la figura de Pérez Corradi por separado”, explicó Próspero. El abogado fue contratado por el estudio jurídico de Luis Yrimia, uno de los denunciados por el asesinado fiscal Alberto Nisman. En el estudio analizan apelar a la figura de “cosa juzgada irrita” para intentar que se revise la condena por el triple crimen de General Rodríguez realizada en Mercedes. No es casual que se analice la creación de un juzgado en la localidad de Buenos Aires.
“Los tres coinciden en que hubo un hecho en medio de la “fuga” en que cambió todos los planes”, aseguró una fuente de extrema confianza de los condenados. El hecho tendría relación con una traición y una amenaza. La justicia investiga los tiroteos de Ranchos, Santa Fe, y si a los hermanos Lanatta alguien los acompañó al salir del penal de General Alvear. La explicación oficial de los integrantes del Servicio Penitencia Bonaerense parece un chiste: del Testigo de Jehová al Fitito que no arrancaba. Es un misterio cómo no se peritaron los celulares activos en la madrugada de la fuga en las cercanías de la puerta de acceso al penal.
“El destino final de los hermanos era un campo en el norte de Entre Ríos”, aseguró una fuente muy cercana a los hermanos Lanatta. “¿Contarán a la justicia esta información?”, se le preguntó a Próspero. “Están dispuesto a hablar de todo, caiga quien caiga” respondió el letrado. En la misma sintonía la Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, le aseguró a Diego Ferrón, hermano de uno de los asesinados en el triple crimen, que “iremos por todos los responsables políticos, sea quien sea”. El fantasma de “La Morsa” aparece una y otra vez.
(*) Especial para Perfil.com