Rodrigo Germán Rivero, acusado por el femicidio de Karen Bustamante (18) y detenido este viernes, será indagado en las próximas horas por el fiscal a cargo de la causa, en procura de establecer si fue efectivamente el asesino de Karen, que apareció degollada en Moreno.
El joven de 20 años fue arrestado en el barrio Ejército de los Andes, más conocido como Fuerte Apache, de la localidad de Ciudadela, por efectivos de la Comisaría Tres de Febrero 6° Ciudadela Norte, según informaron fuentes policiales a Noticias Argentinas.
En la jornada de hoy, Gabriel López, el fiscal de la Unidad Funcional de Instrucción N° 8 de Moreno-General Rodríguez a cargo del caso, indagará a Rivero, que por el momento está acusado por los delitos de homicidio agravado, criminis causa, por haber sido ejecutado contra una mujer, mediando violencia de género y por su ensañamiento y alevosía.
Rodrigo Rivero tenía pedido de captura nacional dos días atrás, por el femicidio de Karen Bustamante, la joven asesinada a golpes y por estrangulamiento el último lunes en el partido bonaerense de Moreno. El hombre tendría antecedentes por violencia de género y otros delitos.
De acuerdo con las fuentes, el femicida fue reconocido por su propia madre, quien se comunicó con el 911, luego de reconocerlo en las imágenes de las cámaras de seguridad que lo ubican junto a la víctima la noche del crimen y en los momentos posteriores al hecho.
El pasado lunes, el cuerpo de Karen fue hallado en el interior de un salón de fiestas deshabitado, situado en calle Rivadavia, entre Concejal Rosset y Tucumán, con signos de haber sido golpeada en la cabeza y en el rostro con un objeto contundente, además de degollada.
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Seguidamente, se difundieron imágenes en las que puede verse al detenido y la víctima en un pool de la zona de Merlo, en la vía pública y cuando el joven descarta una bolsa de arpillera con una baldosa ensangrentada.
Según la investigación, cerca de las 5:00 de la madrugada una cámara de seguridad captó una secuencia, en donde se ve cómo el hombre se aleja rápidamente y recoge de la calle una piedra o trozo de baldosa desprendido de una vereda que guarda en uno de sus bolsillos, mientras que la joven lo sigue de atrás a cierta distancia. Posteriormente, toma una botella de vidrio, que luego apareció destrozada en la escena del crimen y con la que se cree que mató a la joven.
Por último, se observa que Rivero descartó en un cesto de basura un trozo de baldosa ensangrentado envuelto en una bolsa de arpillera, que fue secuestrado por los peritos y se cree fue el objeto contundente con el que golpeó a la víctima en la cara y la cabeza.
