La fiscalía que investiga la muerte de dos ancianas mellizas en un departamento de la Recoleta esperaba detalles de las autopsias para tener certeza del motivo del fallecimiento, aunque crece la hipótesis de la intoxicación por monóxido de carbono.
Las muertes de Susana y Beatriz Laguardia, las hermanas mellizas de 73 años cuyos cadáveres fueron hallados el miércoles en un departamento del barrio de Recoleta, datan de entre cinco y siete meses, es decir que por la fecha en que se habrían producido los decesos, en plena época invernal, "pudo haberse tratado de una intoxicación con monóxido de carbono", indicaron a DyN fuentes allegadas a la investigación.
En ese sentido, diferentes versiones indicaban que había cintas de embalar en las aberturas de las ventanas y puertas, pero las fuentes policiales confirmaron que sólo había burlete en la puerta de entrada, como tiene la mayoría de las puertas de otras casas para evitar la entrada de viento y frío.
"Esa situación robustece la idea de la intoxicación. El departamento era muy chico y el burlete pudo haber ayudado a que el gas se quedara más tiempo en la vivienda y no tuviera lugar de escape", explicaron los voceros.
Por lo pronto, los investigadores de la comisaría 17a. realizaron un relevamiento de los datos de la causa y del departamento de la calle Juncal 1837.
Aunque todavía faltaban detalles precisos sobre la autopsia que se realizó sobre los cadáveres, los informes preliminares confirmaban que las muertes no fueron violentas y que tampoco había signos de violencia en el departamento.
El sumario llegó hoy a última hora a la oficina del fiscal Martín Mainardi, quien tiene delegada la investigación en la que interviene la jueza Silvia Ramond y analizará en los próximos días el informe para ver qué tipo de medidas solicita en la causa.
Puntualmente, las fuentes consultadas por DyN señalaron que se espera conocer los resultados de las pericias realizadas sobre las estufas y el calefón de la vivienda, para confirmar la teoría de la mala combustión en alguno de esos equipos.
Según trascendió, en las últimas horas los únicos familiares que se presentaron en la comisaría fueron son dos primas, de unos 60 años, con las cuales las ancianas casi no tenían contacto.