Oscar Perona, el hombre de 82 años que atropelló y mató en marzo a un peatón en el barrio porteño de Flores, fue procesado por "homicidio culposo agravado" sin prisión preventiva y sus bienes fueron embargados en 200 mil pesos. Aunque la medida, dictada por el juez de instrucción Daniel Turano, fue apelada por la defensa ante la Cámara del Crimen.
Perona, al mando de un automóvil Subaru Legacy adaptado para personas con limitaciones físicas, chocó contra un vehículo y subió luego a una vereda a gran velocidad el 17 de marzo. De inmediato retrocedió para terminar una maniobra con la cual atropelló a nueve personas en inmediaciones de la avenida Rivadavia al 7100, entre Culpina y Varela.
El conductor detuvo la marcha del vehículo a media cuadra del lugar del hecho, donde tuvo que ser protegido por agentes policiales, porque testigos del hecho pretendían someterlo a una golpiza.
A las pocas horas falleció el ciudadano italiano Gennaro Testa, de 82 años, a raíz de las lesiones sufridas en el episodio, mientras que Perona tuvo que ser internado en un centro asistencial tras descomponerse cuando brindaba su versión ante la Justicia, en calidad de detenido.
Por su parte, el juez de instrucción Daniel Turano dictó en las últimas horas el procesamiento del conductor, acusado de la comisión del delito de "homicidio culposo agravado en concurso con lesiones culposas", sin incluir la prisión preventiva.
Perona, defendido por el abogado Marcelo Reale, permaneció detenido 48 horas tras el hecho, hasta que la jueza subrogante Fabiana Palmaghini le concedió la excarcelación bajo caución juratoria.
No obstante, el hombre estuvo internado algunas horas más y los médicos que lo asistieron lo calificaron como paciente "de riesgo", porque había padecido problemas de hipertensión y un accidente cerebrovascular que redujo su motricidad.
Poco después del suceso ocurrido en Flores, reflejado por una filmación exhibida luego por televisión, Perona brindó declaración indagatoria durante cuatro horas, en las que se mostró angustiado. Cuando le mostraron las imágenes del hecho "se dio cuenta de que había hecho un desastre", precisaron fuentes judiciales.
En declaraciones a la prensa, Reale sostuvo que su cliente "tiene su carnet habilitante" y aseguró que se le renovó la autorización para conducir en la revisión que se le hizo el año último. El letrado añadió que su defendido "no tiene una sola infracción de tránsito", a excepción de una multa por mal estacionamiento, para aclarar luego que manejaba "en ciudad, pero no en ruta".
Fuente: DyN