La palabra “menor” o “menores” aparece inmediatamente después de un hecho de Represión Estatal. Es parte de la lógica de invisibilización y tergiversación de la escena real del crimen. Se busca, a través de esta palabra, aparentemente inocente, dejar entrever la relación directa entre menor-peligroso/a-delincuente. Así, dar lugar a un abanico de hipótesis que siempre dejan a las víctimas en el lugar de victimarios y a los victimarios como “defensores de la seguridad”.
Será por eso que los familiares levantamos consignas como “debajo de cada gorra hay un pibe/a con su historia”, y claro que los/as cuatro pibes/as de San Miguel del Monte tenían su historia. Una vida cargada de proyectos que se vio arrasada por una masacre más, entre otras a las que ya nos tienen acostumbrados/as los diferentes gobiernos constitucionales. Aníbal Suárez, joven de 22 años, junto con Danilo Sansone de 13 años, Camila López, de 13 años, y Gonzalo Domínguez, de 14 años, hoy están muertos tras una violenta persecución policial en San Miguel del Monte. Son jóvenes que pasan a integrar la larga lista de pibes y pibas asesinados por el accionar policial en un supuesto contexto democrático.
En realidad, ese contexto se va debilitando a medida que cada gobierno decide ubicar a un sector de la juventud en el lugar de “otro/a peligroso/a” y avanzar a través de políticas represivas y violentas que buscan controlar pero también asesinar, torturar y desaparecer vidas humanas que pasaran a constituir ejemplos claros de disciplinamiento y control sobre los cuerpos de nuestros jóvenes.
En el mismo auto viajaba también Rocio Guagliarello, de 13 años, y está internada con riesgo de vida ¿Será posible que ella, si logra reponerse, pueda ver una sociedad concientizada y denunciando esta problemática que tiene a ciertas juventudes como víctimas de políticas represivas? ¿Será posible que Rocío acceda a obtener justicia por lo que le tocó vivir a ella y sus amigos/as? ¿O será que a esta sociedad argentina violenta y egoísta aún le falta ver derramarse mucha más sangre de jóvenes para conmoverse y pedir un Nunca Más que permita condenar a todos/as los/as responsables de tan tremendos crímenes?
*Es la hermana de Luciano Arruga, el joven que murió en 2009 perseguido por la Policía Bonaerense.
