Se negó a declarar el acusado de matar a ex suegros

Fernando Ignacio Sánchez, el hombre detenido ayer en el Palacio de Tribunales acusado de asesinar a sus ex suegros el 1 de enero último en el barrio porteño de San Cristóbal, se negó hoy a declarar ante la Justicia.

Al ser indagado por el juez de instrucción Osvaldo Rappa, Sánchez se limitó a aclarar que concurrió ayer a Tribunales para entregarse a la Justicia y ponerse a derecho, negando así la versión en torno a que concurrió al palacio para espiar a su ex novia quien había ido a declarar en la causa, dijeron a la agencia DyN fuentes allegadas al caso.

Detención. Sánchez fue detenido ayer en el Palacio de Tribunales de la Ciudad de Buenos Aires, donde justamente también estaba su ex novia para declarar en la causa.

El hecho, de todas maneras insólito, ocurrió alrededor de las 11, cuando la hija del matrimonio asesinado, Gabriela Iglesias, de 27 años, se presentó en los tribunales de Talcahuano 550 para declarar en la causa por el crimen que lleva adelante el juez de instrucción Osvaldo Rappa.

La joven -quien había acusado a su ex pareja como autor del doble crimen y estaba acompañada de los custodios de la Policía Federal que le asignaron tras el hecho- salía de una oficina del tercer piso y vio a su ex novio caminando por los pasillos del edificio.

La chica entró nuevamente al despacho y le informó a su custodio que su novio estaba afuera, por lo que el agente salió y detuvo al sospechoso, quien quedó alojado en la comisaría tercera.

Infeliz Año Nuevo. El hecho que se le atribuye a Sánchez ocurrió en la madrugada del día de Año Nuevo, cuando concurrió a la casa de su ex novia, de la que se había separado hacía dos años, por denuncias de violencia y con quien tenía un hijo.

Al llegar a la vivienda, situada en Garay 2117 del barrio de San Cristóbal, le impidieron el ingreso. Ante esa situación, el hombre habría entrado a la casa a través de una vivienda vecina y se habría desatado una discusión con su ex novia. Los padres de la joven, identificados como Severino Antonio Iglesias, de 76 años, y Emilia Rovalía Abuin, de 57, salieron en defensa de su hija y fueron apuñalados con un cuchillo que había en la casa.

Fuente: DyN