Tras ocho horas de tensión y negociaciones con efectivos del Grupo Halcón, el hombre de 23 años que mantenía a dos policías de rehenes en una casa velatoria de Berazategui, acaba de liberar a uno de los cautivos, a cambio de una botella de gaseosa y pizzas, en un extraño episodio, ya que el delincuente (vestido de gendarme), no venía pidiendo nada a cambio de la liberación de los rehenes. Según trascendió, se trataría de un caso pasional.
El hombre, identificado como Leandro Gustavo Martín y armado con cuatro, armas se encuentra atrincherado en la cochería ubicada en la calles 144 y 24, de Berazategui, desde las 8, donde mantenía como rehenes a dos policías, mientras el grupo elite "Halcón" rodean el lugar y sus negociadores tratan de que esta persona deponga su actitud. Hace instantes se supo que uno de los cautivos fue liberado, luego de que el joven de 23 años por primera vez hiciera un pedido: gaseosa y pizzas.
El superintendente de Coordinación Operativa de la Policía bonaerense, comisario general Salvador Baratta, explicó a la prensa que todo se inició cuando el sospechoso estaba en la puerta de la sala velatoria, donde llamó a una mujer policía que estaba frente a la parada de un colectivo. Cuando la agente se acercó, el hombre la golpeó y le lanzó gas pimienta, tras lo cual la ingresó a la sala velatoria, donde tomó como rehenes a dos hombres que estaban en el local. Sin embargo, aclaró que no ingresó por la fuerza a la sala velatoria, sino que desde hace cuatro días concurría al lugar, luego de "hacerse amigo" de los trabajadores de la sala.
Un llamado al 911 alertó a la Policía sobre lo sucedido y de inmediato un patrullero con dos efectivos llegó al lugar, agregó Baratta. Estos dos efectivos dialogaron con el hombre y lo convencieron que liberara a la mujer policía y a los otros hombres a cambio de ellos. El sospechoso aceptó la propuesta y dejó ir a los tres rehenes, mientras que los dos policías se quedaron con él, explicó Baratta.
El comisario detalló que este hombre se quedó con el arma reglamentaria de la mujer policía y de los otros dos efectivos. "Los negociadores del grupo especial Halcón están tratando de llevar a cabo conversaciones, pero por ahora estamos ante una intransigencia", manifestó el comisario Baratta. Y contó que el delincuente "no muestra nerviosismo, muestra mucha frialdad en el diálogo", acotó Baratta.
Además, puntualizó que la mujer policía "está golpeada y shockeada, más los efectos del gas pimienta". Según trascendió, el motivo de la toma de rehenes sería pasional, ya que se supo que perseguía a una joven del que era compañero, con quien estaba obsesionado. Sin embargo, se desconoce el motivo por el cual decidió manifestar su obsesión a través de la toma de rehenes.
Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.