Vinculan a víctimas con narcos, deudas y tráfico de medicamentos, pero nada se sabe de los asesinos

Los investigadores del triple crimen de los empresarios avanzan sobre la hipótesis de una posible venganza por drogas y tráfico de medicamentos, mientras se confirmó que las víctimas fueron ejecutadas desde corta distancia con una quincena de balazos, varios de ellos disparados con un arma calibre 40. La teoría sobre la venganza mafiosa se reforzó a partir del hallazgo de vainas de ese calibre en el lugar de los homicidios, considerado un tipo que utilizan los "profesionales" del crimen.

Según los resultados preliminares de la autopsia conocidos ayer, Forza recibió siete disparos y un fuerte golpe en la nuca, mientras que Ferrón presentaba cinco balazos y una lesión en la boca y Bina cuatro, todos efectuados en el pecho y la cabeza. Se presume, por la direcciòn de ingreso de los disparos, que los empresarios estaban arrodillados cuando fueron fusilados.

El informe in voce de los forenses que realizaron la autopsia indicó, según las fuentes, que "las víctimas estaban de rodillas y los tiradores a sus espalda y los disparos fueron efectuados de izquierda a derecha. El tiempo de la muerte data de 48 horas antes del hallazgo", en un zanjón situado a la altura del kilómetro 11 de la ruta 6 (en General Rodríguez) hasta donde fueron obligados a caminar antes de ejecutarlos allí. A los fallecidos les colocaron precintos plásticos en las manos para inmovilizarlos, pero luego de asesinarlos se los quitaron. En el lugar se hallaron cinco vainas calibre 9 milímetros y siete de 40.

Los fiscales de Martínez Ariel Apolo y Diego Grau -a cargo del caso por los asesinatos de dos colombianos ejecutados en el Shopping Unicenter el mes pasado también con un arma calibre 40- encomendaron a la Policía cotejar las balas con las usadas para asesinar a Sebastián Forza (34), Damián Ferrón (37), ambos vinculados a la venta de medicamentos, y Leopoldo Bina (35).

Los detectives también tratan de determinar si desde el teléfono de una de las víctimas se habrían comunicado con Julián Andrés Jiménez Jaramillo, el único colombiano sobreviviente del ataque en Unicenter donde murieron sus compatriotas Héctor Edilson "Monoteto" Duque Ceballos -quien tenía pedido de captura de su país por narcotraficante- y Jorge Quintero Gartner.

Tras las autopsias, los cuerpos fueron retirados por los familiares. Las fuentes del caso dijeron a DyN que el hecho de que Forza -dueño de una droguería- haya sido quien recibió la mayor cantidad de disparos "es algo que nos sugiere varias cosas porque demuestra que tenían mayor animosidad hacia él y es algo que vamos a investigar".

La policía y la Justicia sigue buceando sobre los últimos movimientos de las víctimas y para eso analizaban filmaciones de un hipermercado de Quilmes, donde Ferrón dijo que tenía una reunión el día en que desapareció, y de las autopistas Panamericana, que habitualmente tomaba Forza, y del Oeste, por donde habrían sido llevados antes de se ejecutados.

"No se trata de investigar a la víctima, pero sí de determinar los móviles posibles del crimen. Había deudas muy fuertes, pero también otras hipótesis", relataron las fuentes.

En ese contexto, negaron que la fiscal porteña Ana Yacobucci, quien instruye la desaparición de las víctimas, se hubiera "despreocupado" de la denuncia, y en cambio precisaron que el fin de semana último, declararon familiares, amigos y socios comerciales de las víctimas, "pero -advirtieron- parecían ocultar algo de información".

Otra hipótesis estaría orientada a la supuesta conexión de Forza con una causa en la que se investiga una red de narcotraficantes mexicanos, según surgió de una de las tareas de inteligencia encargadas por la fiscalía a la Gendarmería Nacional. "Nos enteramos el lunes por la mañana de esa situación. Fueron intervenidos una docena de teléfonos, pero estuvieron mudos hasta que aparecieron los cuerpos", relataron.

De todos modos, según pudo saber DyN, ni Forza ni las otras dos víctimas aparecen mencionadas en esa causa que lleva adelante el juez federal de Zárate-Campana, Federico Faggionato Márquez.
En cuanto a la hipótesis de los precursores químicos, la investigación parece orientarse a las actividades comerciales y las conformaciones societarias de las empresas a las que estaban vinculadas las víctimas.

Las fuentes no descartaron que la fiscalía pida información a la Inspección General de Justicia y a otros organismos oficiales para establecer el giro de las operaciones y si se trataba de empresas reales o ficticias. Los investigadores saben que el mercado de las drogas se mueve en torno a las denominadas "sustancias de corte", entre las que la efedrina es una de las principales y, según admitieron a DyN fuentes policiales "hay 1.200 kilos de esa sustancia dando vueltas en el país, que no se saben dónde están".


"La efedrina se consigue muy barata en la Argentina, pero en Estados Unidos se vende 16 veces más cara", reflexionaron. El Comité Asesor del Ministerio de Justicia sobre la nueva ley de Drogas ya había advertido sobre la cuestión hace al menos tres meses. También surgieron en las últimas horas especulaciones sobre otras posibles actividades de las víctimas, y especialmente Forza, marco en el cual los detectives no descartaban ahondar las pesquisas en torno a posible tráfico de medicamentos, sobre todo de valores importantes, destinados a enfermedades graves.

Hasta allí, entonces, la pesquisa que hacen los investigadores, buscando relacionar a las víctimas con el delito. Nada se escuchó ayer, sin embargo, sobre el hecho de que Forza había hecho una denuncia contra una organización de venta ilícita de remedios ante la comisaría 3ra. de la Federal, tras lo cual recibió las amenazas y se convirtió en "testigo protegido".

"Para Semana Santa te vamos a matar", le habían dicho en una de las amenazas que recibió en su  distribuidora de medicamentos en el centro porteño, sobre la calle Montevideo, tras lo cual hizo la denuncia. Desde entonces Forza estaba armado.

Finalmente hay que señalar que el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, se reunió con su ministro de Seguridad, Carlos Stornelli, y los superintendentes de la Policía provincial para interiorizarse sobre el triple crimen de los empresarios, ocasión en la que exhortó nuevamente a las autoridades a combatir el narcotráfico.

Según indicaron fuentes oficiales, en el encuentro Scioli brindó su apoyo a los funcionarios y los instó a "la lucha contra el narcotráfico y a no resignarse a convivir con el delito".

Fuente: DYN