El Gobierno salió a criticar de forma homogénea el paro convocado por Hugo Moyano y Pablo Micheli. El ministro de Trabajo Carlos Tomada exhortó a las organizaciones sindicales a "no obstaculizar a los trabajadores que quieran realizar sus tareas".
Tomada calificó el paro como una medida "parcial, en el que sólo algunos sindicatos decidieron parar". Y adjudicó su organización a "sectores del sindicalismo y una representación patronal agraria", en referencia a la Federación Agraria que conduce Eduardo Buzzi.
"No obstaculicen a los trabajadores que quieran realizar sus tareas habituales, ya que estarían afectando el derecho constitucional de trabajar", dijo en un comunicado.
Responsables. El jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, apuntó contra el paro y sostuvo que “mientras en el mundo los sindicatos reclaman contra el ajuste, acá unos pocos dirigentes con ambiciones políticas bloquean rutas para hacer sentir una medida sin apoyo de la clase trabajadora”.
Más tarde, al hablar con el canal C5N, Abal Medina cuestionó la consigna principal de la medida de fuerza, al afirmar que "semejante cantidad de piquetes por un reclamo al Impuesto a las Ganancias parece claramente un despropósito", y agregó: "Están demostrando que no tienen el apoyo de quienes dicen representar para poder garantizar que se cumpla la medida".
El funcionario también criticó la medida de fuerza y la calificó de una medida "extorsiva": "No hay paro. Un paro es cuando los obreros y los empleados deciden no acudir a sus lugares de trabajo. Esto es un piquetazo extorsivo, en el que los que logran ir a trabajar son apedreados, como estamos viendo en el centro porteño".