José Alperovich ya tiene experiencia en reformar la constitución para lograr un período más de mandato al frente de Tucumán. Como la última reforma, la de 2006, resulta un poco ambigua en cuanto a un tercer mandato -y nada peor que dejar la decisión final en manos de la Justicia-, el gobernador norteño decidió volver a modificar la carta magna.
La modificación de 2006 permite la re-relección, pero algunos pasajes pueden ser interpretados de forma imprecisa, como la posibilidad de realizar tres mandatos de forma consecutiva. Así, con algunos retoques, el tucumano podrá soñar con un triunfo en 2011, un tercer mandato y la prolongación de su poder más allá de lo que en muchas zonas del país está permitido.
Al justificar sus intenciones, Alperovich delegó la responsabilidad en los votantes. " Que el pueblo tucumano pueda decir si puedo seguir o no", disparó.
Además, disfrazó sus intereses políticos con la necesidad de una modificación para solucionar “el tema de la Justicia”. “Todos saben que la reforma de la Constitución sí o sí hay que hacerla para solucionar el tema de la Justicia; porque es imposible que suceda a causa del fallo”, amplió luego ayer en contacto con la prensa.
Según consigna el diario La Nación, Alperovich hace referencia a la crisis judicial que atraviesa la provincia ya que alrededor del 40 por ciento de los cargos de ese poder se encuentran vacantes. Según una ley, el gobierno puede designar esos cargos sin concurso, pero la Justicia no lo permite. Modificando la constitución, el gobernador asegura que se podrán cubrir esos cargos mediante un nuevo consejo asesor con representación igualitaria de los tres poderes creado para esta ocasión.