El ministro de Desarrollo de la Comunidad de la Provincia de Buenos Aires, Andrés “Cuervo” Larroque, habló este viernes 4 de junio sobre la campaña de vacunación en el territorio bonaerense y mencionó que “la pandemia conspira contra el objetivo del Frente de Todos”, que tiene que ver con priorizar “la producción y el trabajo”.
En diálogo con Hablemos Todo Hoy en Metro 95.1, el programa que conduce Nacho Otero, Larroque aseguró que “ya tenemos vacunada al 90% de la población mayor de 70 años con y sin comorbilidades previas” y que en la actualidad “se está avanzando en la franja de 40 a 60 años con patologías previas”.
Por otro lado, al ser consultado sobre si estaría presionando a Nación para una vuelta del IFE o una segunda ronda del bono de 15 mil pesos, el ministro de Desarrollo de la Comunidad sostuvo que “cualquier tipo de asistencia es bienvenida” y que, aunque “la relación entre Nación y la Provincia es óptima, no estamos solicitando ninguna ayuda en específico".
Sobre este punto, reivindicó “el éxito del ATP y el IFE”, al tiempo que reconoció que “todavía no logramos encontrar las políticas de mediano plazo en medidas de asistencia social que nos conformen a todos”, dado que “estamos en una situación de emergencia”.
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"La mejor política social es la creación de empleo. Eso requiere una transformación del modelo económico que en los cuatro años previos al 2019 priorizaba al sistema financiero y no tanto a la producción. El objetivo del Frente de Todos cuando llega al Gobierno es poner en el centro a la producción y al trabajo”, señaló.
En tal sentido, explicó que “el contexto no nos permite desarrollar el programa que teníamos al ganar las elecciones”, pero advirtió que “eso no quiere decir que haya cambiado”, por lo que consideró necesario volver a recomponer ese modelo de producción y trabajo “en cuanto se normalice la situación”.
A modo de conclusión, el “Cuervo” reflexionó sobre su experiencia en el Gobierno y sus cambios en el pasado y puntualizó: "El contexto y la experiencia influye. Uno no reniega de lo que hizo, pero sí ponerlo en contexto con lo que pasaba entonces. Fue un tiempo de mucha fricción y nadie se benefició de esa situación”.
Y concluyó: “Agudizar la grieta nos terminó llevando a un desenlace en 2015. Por supuesto tiene que haber lugar para la reflexión, por lo que puedo decir que aprendí que el barullo no colabora para encontrar soluciones. El barullo nos hace perder de vista que hay posibilidades de diálogo. Cuando la situación es ensordecedora no logramos prestarle la debida atención".
CFT CP