Los gobernadores del PJ y de Cambiemos acusaron recibo de la delicada situación económica y acordaron no fijar un número para la paritaria docente, aunque solicitaron no tener "a los chicos de rehenes".
Golpeados por la inflación -aunque ahora estaría a la baja-, por los despidos en el sector industrial, y porque en la mayoría de las provincias las cuentas están en rojo, los caciques territoriales hicieron catarsis hoy en la reunión que se llevó a cabo en el Consejo Federal de Inversiones.
"Las provincias están destruidas", confesó un ministro al salir del cónclave. El repaso de los números sugiere que los gobernadores intentarán negociar una paritaria menor que la del año pasado, y aunque no quisieron poner un techo, es posible que propongan entre un 17 y un 20 por ciento. El problema es que, cuando escucharon el número, los gremios se pusieron en alerta y anticiparon que no lo aceptarán.
La negociación será difícil. Los 16 mandatarios que participaron hoy de la reunión se pusieron de acuerdo en que solicitarán al gobierno nacional dos cosas: que no fijen una paritaria nacional -porque eso les marca la agenda- y que aumenten la cantidad de fondos destinados a colaborar con el pago de sueldo a los docentes.
Entre otros estuvieron Juan Manuel Urtubey (Salta), Omar Gutiérrez (Neuquén), Domingo Peppo (Chaco), María Eugenia Vidal (Buenos Aires), Diego Santilli (por la Ciudad), Gustavo Bordet (Entre Ríos), Gerardo Morales (Jujuy), Miguel Lifchitz (Santa Fe) y Ricardo Colombi (Corrientes).
Hubo dos gobernadores ausentes con aviso. El chubutense Mario Das Neves y el puntano Alberto Rodríguez Saá, en desacuerdo con la estrategia de la nueva "liga" de mandatarios. Rodríguez Saá fijó su postura a través del diputado nacional Luis Lusquiños. Sostuvo que no hay que fijar un techo, sino que hay que tener en cuenta las variables económicas que, consideró, están marcando que hay una crisis.
Das Neves tampoco está de acuerdo en poner un número para empezar a negociar pero por el momento hizo las paces con el gobierno nacional. Mientras se hacía la reunión de gobernadores, él estaba reunido con los ministros Francisco Cabrera y Juan José Aranguren, por temas de su provincia.
Fuentes bonaerenses dijeron a PERFIL que es importante mantener el poder adquisitivo de los docentes, pero que ven una brecha entre lo que piden y la inflación de este año que, creen, va a la baja.
El gobernador salteño, Juan Manuel Urtubey, sostuvo que hay tres variables que se tendrán en cuenta a la hora de discutir, una de ellas será la inflación. Como en el presupuesto nacional está previsto una baja sensible en este ítem, los mandatarios se sujetarán de esto, aunque no exclusivamente, para negociar los salarios.
Las otras dos variables son "las fuentes de financiamiento". Para Urtubey, no se puede unificar criterios porque las realidades de las provincias son diferentes.
En eso coincidieron todos. Las provincias solicitaron el año pasado que el gobierno destrabe el endeudamiento para poder cubrir el déficit, pagar sueldos y financiar obra pública. En eso están los gobernadores.
