Una nueva revelación encendió las alarmas entre los abogados de Cristina Kirchner. Resulta que una de las asesoras del diputado nacional Gerardo Milman, que estuvo junto a él en el bar Casablanca días antes del intento de asesinato contra la vicepresidenta, se presentó en Comodoro Py y declaró que le borraron el contenido de su celular en una oficina que sería de Patricia Bullrich.
Se trata de Ivana Bodsziewicz, una de las asesoras del diputado que tiempo atrás se presentó a declarar en la causa que investiga el atentado y dijo no recordar que había estado con Milman en el bar ubicado frente al Congreso, pero cambió su respuesta cuando le mostraron la filmación de una cámara de seguridad que la ubicaba en tiempo y espacio. "Todas las líneas conducen a dirigentes del PRO", dijo este lunes 8 el ministro de Justicia, Martín Soria, al referirse al tema.
Según reveló Página/12, Bodsziewicz se presentó sorpresivamente en los tribunales de Retiro y pidió declarar. Como el fiscal Carlos Rívolo estaba por tomar licencia, le dieron una citación para el 10 de mayo, pero el pasado viernes volvió a Comodoro Py 2002 y solicitó que alguien le tome declaración.
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Ante la fiscal Alejandra Mángano, subrogante, la mujer contó que en realidad no había borrado el contenido de su celular por voluntad propia, como había dicho antes, sino que la habían llevado a las oficinas de Bullrich en la Avenida de Mayo, donde un perito habría estado cuatro horas trabajando en el borrado.
"A pesar de que Comodoro Py se niega a investigar, a ocho meses del atentado contra la vida de Cristina hay dos cosas que están claras: El grupo que ejecutó el atentado no eran unos 'loquitos sueltos' como intentaron sembrar desde el primer momento; y que todas las líneas de investigación conducen a dirigentes del PRO", respondió el titular de la cartera de Justicia ante una consulta de PERFIL.
Martín Soria: "Bullrich colaboró para borrar pruebas"
En esa línea, el funcionario manifestó que "la declaración de la secretaria de Milman evidencia que la candidata a presidenta del principal partido de la oposición colaboró para borrar pruebas de la causa del intento de asesinato a la vicepresidenta".
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Además, se quejó por "la negligencia y la complicidad por parte del Poder Judicial para dar con los verdaderos culpables del atentado", algo que "expone el nivel de degradación al que han llegado sectores del Poder Judicial".
La declaración de Bodsziewicz revolucionó los tribunales de Retiro donde se investiga el atentado que sufrió la vicepresidenta el pasado 1 de septiembre en la puerta de su casa, en Juncal y Uruguay, por parte de Fernando André Sabag Montiel, detenido junto a Brenda Uliarte y Gabriel Carrizo, integrantes de la llamada "banda de los copitos", que estuvo atrás del atentado.
Ocurre que la ex asesora de Milman fue una de las que fue llamada a declarar en diciembre pasado luego de que un testigo contara ante la Justicia que estuvo en el bar Casablanca y lo escuchó a Milman decir que "cuando la maten voy a estar camino a la costa".
La causa que investiga el intento de magnicidio está en manos de la jueza federal María Eugenia Capuchetti, que es blanco de fuertes cuestionamientos por parte de la vicepresidenta y su abogado José Ubeira. El argumento principal de la crítica es que no investiga la llamada "pista Milman", que involucra al ex jefe de campaña de Bullrich y, por ende, sostiene que el intento de asesinato habría tenido una motivación desde ese sector de la oposición.
Soria y una pista que toma fuerza
Con la declaración de Bodsziewicz, que también habría declarado ser blanco de presiones para no presentarse ante la Justicia, esa pista toma fuerza.
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"Lo más increíble del nivel de inacción de Capuchetti y compañía es que la asesora de Millman, que confesó la supresión de pruebas del atentado a Cristina, tuvo que ir varias veces a la fiscalía de Rivolo a pedir que la dejen declarar. No solo no buscan la verdad, sino que la obstaculizan hasta el más mínimo detalle", sumó Soria este lunes en declaraciones a este medio.
En esa línea, el ministro insistió con que la jueza "debe tener la dignidad de dar un paso al costado", y calificó su actuación en la causa como "un fracaso absoluto".
"La investigación se caracteriza por la eliminación sistemática de la prueba. Se borró el celular del que empuñó el arma, no se intervinieron las comunicaciones telefónicas que Brenda Uliarte registró los días posteriores al atentado y ahora nos enteramos de que Bullrich borró los celulares las secretarias de Milman. Y a 8 meses del atentado, sigue sin saberse absolutamente nada de los autores intelectuales e instigadores. Mejor dicho: se sabe, muchísimo, pero muy a pesar del accionar de la jueza y del fiscal", completó Soria.
CP
