El gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, quiere que promocionar su nombre con fondos públicos no sea una violación a la Ley de Ética Pública. Así se desprende del decreto 2025, firmado el 2 de octubre de 2009 ( ver facsímil ), en el que instruye al Fiscal del Estado a plantear la inconstitucionalidad del inciso que le impide usar su nombre e imagen en la "publicidad de los actos, programas, obras, servicios y campañas de los órganos públicos".
Capitanich argumenta que la Constitución Provincial "garantiza a todas las personas el goce de los denominados Derechos Humanos, y entre otros el derecho a la propia imagen, sentando las bases de la estructuración de la sociedad del Siglo XXI" y por eso exige se lo deje utilizar la leyenda "Gestión Capitanich" en sus actos de Gobierno, dejando sin efecto la Ley 6.137, que modifica el artículo 1 de la Ley Nº 5428 de Ética Pública.
Poco ético. A pesar de lo que dicta la ley, 'Coqui', como se conoce al mandatario, ha violado en reiteradas oportunidades la Ley de Ética Pública, que ahora pretende reformar. En noviembre del año pasado, la legisladora del ARI, Alicia Terada, denunció que Capitanich violaba la norma usando la leyenda "Gestión Capitanich" en las camionetas de la empresa de Agua del Chaco ( ver imágenes ). En junio de 2006, otra legisladora, Marita Barrios, hizo una presentación similar contra el mandatario porque máquinas de vialidad llevaban banderas promocionándolo en plena campaña electoral.
El gobernador aprovechó hasta el "Día del Dengue" para hacer proselitismo en actos públicos. El 6 de mayo pasado, mientras él recorría la ciudad de Sáenz Peña -epicentro de la epidemia- con la entonces ministra Graciela Ocaña, sus militantes repartieron casa por casa cartas invitando al acto de lanzamiento oficial de las listas kirchneristas, escritas y firmadas por el propio Capitanich ( vea la carta ).
El gobernador K volvió a violar la ley cuando publicitó su gestión en la contratapa de la GuíaTelecom de Chaco y Formosa, hecho que la Fiscalía de Investigaciones Administrativas definió como una "propaganda irregular". Su foto, sonriente y en primer plano, no pudo ser removida, a pesar de una intimación judicial, debido a que las guías ya habían sido impresas y repartidas.
Críticas y el ejemplo de Cristina. La legisladora Terada, quien a partir de diciembre será diputada nacional, apuntó que el planteo del gobernador " carece de sustento fáctico y legal" y aseguró que, invocando el derecho a la propia imagen, pretende "asimilar erróneamente una cuestión individual y personal, referida al ámbito privado, con la esfera de lo público, que involucra a los funcionarios".
En ese sentido, expresó que, de prosperar el pedido, los funcionarios y autoridades podrían hacer publicidad de sus nombres con fondos públicos, en una suerte de institucionalización de la violación de la Ley de Ética Pública.
Sin embargo, Capitanich reclama poder hacer uso de su nombre como lo hace la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que figura en cada una de las obras públicas del Plan de Obras para Todos los Argentinos. Aunque parezca contradictorio, esa insólita publicidad a Cristina es una de las exigencias detalladas en el manual de cartelería que deben cumplir los contratistas del Estado.
(*) redactor de Perfil.com