Carta Abierta cuestionó la ley antiterrorista

"Comprendemos los motivos que llevaron a su elaboración, pero sería bueno que el nombre y muchos de los fundamentos de la ley antiterrorista puedan ser revisados en otra ocasión parlamentaria", opinó Horacio González, director de la Biblioteca Nacional, en la presentación de un nuevo documento de Carta Abierta, el colectivo de intelectuales kirchneristas.

La "Carta de la Igualdad", que puede leerse completa en el sitio web del grupo, fue presentada ayer la Asociación Argentina de Actores. Estuvieron presentes varios de los intelectuales afines al oficialismo, como el filósofo Ricardo Forster; junto al titular de una fracción de la CTA, Hugo Yasky; y la presidenta de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, quien también había criticado la ley.

"El interés en el combate al lavado de dinero y la evasión fiscal son objetivos importantes y destacables de la política del gobierno", sostiene el texto de Carta Abierta. Y agrega: "Pero resulta equivocado legislar esas cuestiones en el formato de 'Ley Antiterrorista', como se lo hace en el actual proyecto que trata el Congreso".

"Ese dispositivo adopta la duplicación de condenas acogiéndose a una definición del concepto de terrorismo de carácter tan inespecífico, que podría utilizarse en fallos judiciales que criminalicen la protesta social. Formato antiterrorista e inespecificidad de acepción que deriva del poder y las presiones norteamericanas en los foros internacionales", afirma el documento.

"El gobierno argentino se ha destacado por su voz crítica en ellos y por eso sorprende y preocupa esta adopción de un estándar internacional contradictorio con el espíritu democrático del proyecto nacional que hoy despliega", concluye.

El texto, leído por siete integrantes del espacio, es el undécimo documento conjunto de Carta Abierta, un espacio de intelectuales afines al kirchnerismo que surgió en 2008 para defender al gobierno durante el conflicto con el campo. Su última aparición fue en noviembre, para defender la gestión del camporista Mariano Recalde al frente de Aerolíneas Argentinas.