A más de un mes de la desaparición de Santiago Maldonado, los peritos que intervinieron en la causa detectaron un inquietante mensaje que fue enviado por uno de los gendarmes que participaron del desalojo en la Ruta 40, en Cushamen, el pasado 1° de agosto.
"Les dimos corchazos para que tengan", dice el agente en un audio que le mandó a un superior. Sin embargo, como indica el diario La Nación, los peritos no saben si al hablar de “corchazos” el oficial se refiere a balas de plomo o de goma.
Las dudas surgen a partir de la denuncia de un policía de Río Negro que participó de uno de los rastrillajes que se realizaron para dar con el paradero de Maldonado. El pasado 16 de agosto, el oficial encontró cartuchos de FAL y proyectiles nueve milímetros pero, según declaró, la fiscal Silvina Ávila le dijo que no los recolectara porque "no era lo que se buscaba".
Más de 70 teléfonos celulares que se le secuestraron a los gendarmes que estuvieron en el procedimiento fueron peritados por los investigadores.
El gendarme que hizo referencia a los "corchazos" es uno de los uniformados que el día del operativo llegó hasta la vera del río Chubut, por donde los manifestantes huyeron.
Hoy es un día clave para el caso Maldonado ya que se realizará la audiencia para tratar la recusación del juez federal de Esquel, Guido Otranto.
La Cámara Federal de Comodoro Rivadavia se reunirá para resolver el pedido de recusación planteado por Sergio Maldonado (hermano del joven artesano desaparecido desde el 1° de agosto) y por organismos de defensa de los derechos humanos, como el CELS.
