Encabezados por Raúl Castells, piqueteros marcharon frente a la sede de la jefatura de Gobierno porteña en rechazo a la disposición del gobierno de Mauricio Macri, que establece que los manifestantes deben pedir autorización municipal para movilizarse por la Ciudad.
Durante la marcha, el ex candidato a presidente no sólo no fue advertido por la Justicia -como había amenazado Macri-, sino que además consiguió una audencia para el jueves próximo con autoridades de la Jefatura de Gobierno.
En dicho encuentro conversarán la viabilidad de poner en marcha otra vez el comedor solidario en Puerto Madero, uno de los barrios más caros de la ciudad de Buenos Aires.
Castell dijo que consiguió que el gobierno porteño sacara las palabras "permiso y autorización" de la disposición que prevé que los manifestantes deben informar su cronograma de protestas a las autoridades porteñas.
"No voy a pagar ninguna multa ni hacer ninguna tarea porque nuestra vida está dedicada a los que más necesitan", reflexionó el dirigente piquetero.
Por último, MIJD entregó un petitorio para que sean liberados presos políticos en la sede del Ministerio del Interior que funciona en la Casa de Gobierno nacional.
Crónica de una protesta. El movimiento que encabeza Castell se concentró en Constitución -donde bloqueó las boleterías por unos minutos- para marchar a Plaza de Mayo. De la marcha participaron también la Coordinadora de Unidad Barrial (CUBA) y el Movimiento Territorial de Liberación (CUBA-MTR).
Minutos antes de partir de Constitución, Castells aseguró que la marcha de protesta que encabeza "sólo realizará cortes parciales", durante el recorrido previsto desde la terminal de trenes de Constitución hacia la Jefatura de Gobierno porteña.
Así, el líder piquetero volvió a desafiar al gobierno de Macri, que había informado que la Justicia sólo actuará en caso de cortes totales ya que, según informaron, "no se trata de impedir las protesta sino de organizarla para garantizar la libre circulación".
Las agrupaciones consideraron "una amenaza" que el Gobierno de la Ciudad exija pedir autorización para manifestar ya que es "ilegal e anticonstitucional" por lo que decidieron hacerlo unilateralmente.
Por su parte, Guillermo Montenegro, ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad, anticipó que si los piqueteros no garantizan la "libre circulación" , intervendrá la Justicia.
En ese sentido, el fiscal general Germán Garayano afirmó que con cortes de calles “se va a hacer el requerimiento a la Policía Federal para que se cese en esa actividad, toda vez que está en contra de una norma específica que establece la libre circulación."
La movilización comenzó pasadas las 10.30, una hora después de que Castells pidió en Constitución que Metrovías reincorpore a tres empleados despedidos. Los piqueteros se apostaron frente a las boleterías, custodiadas por la Policía Federal, para dar a conocer su demanda, pero "no las bloquearon", aseguraron desde el Ministerio de Justicia y Seguridad que encabeza Aníbal Fernández.
Luego, la marcha finalizó frente a la Jefatura de Gobierno porteña, donde el MIJD consiguió acordar un encuentro con autoridades del macrismo para tratar distintos temas que van desde la puesta en funcioamiento del comedor de Puerto Madero hasta el asunto sobre la legalidad de los cortes de calles.
Fuente: Télam
