El juez federal Claudio Bonadio validó los testimonios de 31 “arrepentidos” en la Causa de los Cuadernos de las Coimas. Para el magistrado, esos imputados colaboraron con pruebas vitales para la investigación en la que la principal acusada es Cristina Kirchner, varios de sus exfuncionarios y empresarios de la construcción.
Bonadio considera que a cargo del Gobierno, Cristina recibió sobornos de empresarios que a cambio obtuvieron discrecionalmente obras públicas. En el medio, según el juez, participaron exfuncionarios como el entonces ministro de Planificación, Julio de Vido y el por entonces secretario de Transporte, Ricardo Jaime. Los dos están detenidos por diversas causas.
Bonadio validó los testimonios del señalado como financista de los Kirchner, Ernesto Clarens y del ex mano derecha de De Vido, José López. También de empresarios como Carlos Wagner y Aldo Roggio.
El juez avanzó así un paso más en una de las investigaciones más grandes por corrupción de los últimos años en la Argentina, por la cantidad de acusados y el dinero que, sostiene el juez, está implicado en las operaciones.
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La figura del arrepentido, que se creó por ley durante el gobierno de Mauricio Macri, fue cuestionada por varios sectores de la oposición por la supuesta discrecionalidad con la que se puede otorgar y la presunta fragilidad de un testigo que, de estar en prisión, puede pasar a quedar en libertad si involucra a alguien por encima de su jerarquía.
En otro caso, el de los pagos ilegales en el soterramiento del Sarmiento, que involucra a Odebrecht y al empresario Angelo Calcaterra, la Cámara de Apelaciones anuló todas las decisiones (procesamientos y faltas de mérito) que había dictado el juez de primera instancia Marcelo Martínez de Giorgi. Lo que cuestionó la Cámara fue que las decisiones carecieron de los elementos necesarios y que no se habilitaron las medidas de prueba que pidió la defensa.
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De acuerdo a un cable de NA, los arrepentidos que fueron validados por Bonadio son, entre otros, Claudio Uberti (ex Occovi), el contador de los Kirchner, Víctor Manzanares, y Carolina Pochetti, viuda de Daniel Muñoz, ex secretario privado de Néstor.
Fueron aceptados también Carlos Wagner, ex titular de la Cámara Argentina de la Construcción; el propio Calcaterra, Roggio, Benjamín Romero, Alberto Taselli, Enrique Pescarmona, Juan Carlos de Goycoechea de Isolux, el financista Ernesto Clarens, y el chofer Oscar Centeno.
“Habiendo analizado lo expuesto por cada uno de los imputados colaboradores mediante la prueba realizada, podemos afirmar que sus testimonios posibilitaron lograr un significativo avance en la investigación llevada a cabo en la presente causa y sus conexas”, precisó el magistrado.
MC
