En un largo discurso en el que destacó haber visto "el gran triunfo de Cristina, enfrentando las arremetidas de la oligarquía", el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, dijo hoy en Buenos Aires compartir "la misma batalla" con el matrimonio Kirchner, y comparó esa lucha con la que sostuvieran Simón Bolívar, José de San Martín, Juan Domingo Perón y el Che Guevara.
"Yo soy peronista, soy un peronista profundo, desde el alma", gritó Chavez desde el atrio al comienzo de su alocución, que realizó como parte de un acto realizado en el partido bonaerense de Almirante Brown con motivo de la firma de distintos convenios entre el Estado y la Fundación Madres de Plaza de Mayo.
Previamente, Chávez había manifestado "profunda admiración" por la mandataria argentina y llamado "querida madre" a Hebe de Bonafini, quien junto con otras integrantes de las Madres lo escuchó atentamente desde abajo del escenario al igual que integrantes de varias organizaciones sociales como la FTV de Luis D'Elía.
Recién después de saludar a todas y cada una de esas agrupaciones, que le devolvieron la gentileza vitoreándolo, un presidente venezolano "conmovido" según él mismo dijo sentirse comenzó a hacer referencia al cambio que observó en el país desde que en 1994 lo visitó por primera vez hasta hoy.
Claro que, mientras rememoraba aquella visita inicial al país en tiempos de lo que llamó la "plaga neoliberal", Chávez tuvo tiempo no sólo para admitir su condición de "peronista profundo, desde el alma" y calificar a Perón como un "soldado de América, de la misma línea que Bolívar o San Martín", sino también para ventilar una confesión que Néstor Kirchner le hiciera.
"Néstor me decía que él se duerme viendo Telesur", dijo concretamente el presidente venezolano tras pasar detrás suyo el recién llegado al acto ministro de Comunicación venezolano, Andrés Izarra, quien además es presidente de la cadena televisiva estatal venezolana.
Tras decir que "nuestra patria grande ha renacido de entre los muertos", Chávez se manifestó "conmovido por ver un Gobierno comprometido con su pueblo", y agregó: "Tienen ustedes una gran presidenta, como tuvieron a un gran presidente en Néstor Kirchner y como estoy seguro que seguirán teniendo, porque estoy seguro de que a los grupos que destrozaron nuestros pueblos les pasó su hora".
Luego, el mandatario se refirió al momento actual como "una crisis perfecta" y no sólo de carácter "alimentaria", sino también "de moral" y "de ideas", ya que según dijo "lo que va a morir se resiste a morir, y lo que va a nacer no termina de nacer". A continuación, sentenció dirigiéndose a los Kirchner: "Este desafío nos tocó a nosotros, no podemos dejárselo a nuestros hijos".
"Cueste lo que cueste, debemos dejarles a nuestros hijos una patria grande, peronista, guevariana y bolivariana", concluyó Chávez, quien luego hizo un repaso por las polémicas circunstancias en que falleció y fue enterrado Simón Bolívar para terminar diciendo que "vive Bolívar, como viven Perón, el Che y Evita".
Ya al final de su discurso, y tras anunciar que "aquí estamos las hijas y los hijos de Bolívar", Chávez dijo: "Yo ví en 2002 cómo se levantó el pueblo argentino, cómo rompió con las cadenas del neoliberalismo... Hemos visto el gran triunfo de Cristina, enfrentando las arremetidas de la oligarquía y hablando claro al mundo... Hoy seguimos compartiendo la misma batalla, porque somos el mismo pueblo y la nuestra es la misma pasión".