Cada resultado local es nacionalizado. No importa si se trata de un pequeño pueblo o la capital de una provincia clave. La necesidad de mostrar triunfos (y remarcar derrotas del rival) llevan a que la exageración sea moneda corriente a la hora de mostrar fortaleza electoral.
Por eso, a poco más de 3 semanas de las PASO, el peronismo y Juntos por el Cambio siguen con atención todo lo que pueda pasar este domingo 23 de julio en la Ciudad de Córdoba y una semana más tarde en Chubut, últimas elecciones locales antes de las primarias nacionales.
En Córdoba, los dos principales candidatos a intendente son el oficialista Daniel Passerini, que se muestra con el gobernador electo Martín Llaryora, y el opositor Rodrigo de Loredo, quien en el último tramo recibió el respaldo de los precandidatos Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich, además del expresidente Mauricio Macri.
Bullrich versus Larreta: guerra de nervios
Passerini aprovechó la recta final de la campaña para repetir las críticas hacia su principal rival por el tema de los dos candidatos de su lista que tienen familiares directos involucrados en causas de narcotráfico. Además se mostró el martes con Llaryora y el gobernador Juan Schiaretti, durante una recorrida por la urbanización del barrio Los Artesanos, en el sureste de la Capital y luego realizó un cierre con ellos dos.
“Hay un candidato que está más pensando en ser el próximo candidato a gobernador que en gobernar la ciudad. Con Martín (Llaryora) ya demostramos que trabajando en conjunto podemos mejorar la ciudad. Es lo que seguiremos haciendo si la gente me vota el domingo”, apuntó.
Así serán los cierres de campaña de los candidatos para intendente en Córdoba
Por su parte, De Loredo apostó a nacionalizar la contienda con la llegada en la plaza General Urquiza de barrio San Vicente de Bullrich. Allí dijo que Juntos por el Cambio viene en “una ola de crecimiento que se nota”, y que, en ese marco, De Loredo es “la persona indicada en el momento indicado”.
¿Quién gana el domingo? Si bien nadie se anima a dar un pronóstico, sobre todo por los números erróneos de las encuestas en el último tiempo, todos apuestan a nacionalizar un eventual triunfo.
Elecciones y crisis oficialista en Chubut
El próximo 30 de julio, Chubut tendrá elecciones sin PASO. Se enfrentarán Ignacio Torres (Juntos por el Cambio) y Juan Pablo Luque (Arriba Chubut). La novedad es que el oficialismo logró la unidad después de más de 20 años para frenar lo que las encuestas dan como un triunfo de la oposición.
Luque, al estilo kirchnerista en el ámbito nacional que se despega del presidente Alberto Fernández, hizo lo mismo separándose del gobernador Mariano Arcioni. “Yo con Arcioni no tengo nada que ver. En las últimas elecciones fui en al boleta con [Carlos] Linares”, disparó.
En Chubut podría darse un batacazo, ya que allí hay hegemonía justicialista desde hace más de dos décadas. El último censo marcó que allí viven 603.000 habitantes. Para ganar, la elección es similar a la de la provincia de Buenos Aires: se llega al Poder Ejecutivo con mayoría de sufragios, es decir que alcanza con un voto más que el segundo y no hay balotaje.
A días de las elecciones en Chubut, un acto de campaña terminó a los tiros
La crisis de la provincia devino en una crisis oficialista, a tal punto que Arcioni no pudo quedarse con el primer lugar en la lista para la Cámara de Diputados. Allí se quedó el actual titular de la Policía Aeroportuaria Nacional (PSA), José Glinski.
Los otros tres candidatos en la carrera a la gobernación son César Treffinger (Por la Libertad Independiente Chubutense), Emilse Saavedra (Frente de Izquierda) y Oscar Pettersen (Generación por un Encuentro Nacional).
Dónde voto: ya se puede consultar el padrón definitivo para las elecciones 2023
En los últimos sondeos, la consultora Trespuntozero realizó una encuesta entre el 1 y el 9 de julio de 2023. Reflejó que en primer lugar de preocupación es la educación con 45,5%, en segundo la corrupción con 13,3%, y en tercer lugar la inflación con 12,3%.
Torres es quien tiene mejor imagen positiva, con 45,1%, sobre 36,7% que la considera mala (con un diferencial +8,4%). Le siguen Luque, con 36,5% de positiva y 40,7% de negativa (diferencial de -4,2%); Gustavo Menna, con 31,4% positiva y 38,5% de negativa (diferencial de -7,1%); Ricardo Sastre, con 25,4% de positiva y 53,3% de negativa (diferencial de -27,9%); Treffinger, con 22,7% de positiva y 31,5% de negativa (diferencial de -8,8%); y Mariano Arcioni, con 22,3% de positiva y 73,7% de negativa (diferencial de -51,4%).
El estudio refleja que los chubutenses se inclinan en un 54,5% por que cambie el gobierno provincial Chubut Somos Todos, mientras que el 16,6% prefiere que continúe gobernando el espacio político, y un 32% se muestra indeciso.
RI/ff