Era la primera protesta conjunta de las dos centrales. "No hay que andar llorando por la calle como bebés", había dicho el gobernador Colombi. Fotos.
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La Policía correntina reprimió hoy la primera marcha conjunta de la CGT y la CTA en la Provincia, cuando una columna intentaba llegar a la Casa de Gobierno y a la Legislatura para entregar copias de un petitorio unificado en demanda de la aplicación de un aumento salarial para empleados públicos, establecido en la ley de Presupuesto 2011 local.
Los organizadores de la movilización denunciaron que el accionar de la fuerza de seguridad provocó heridos -sin precisar la cantidad-, al tiempo que el gobernador de Corrientes, el radical Ricardo Colombi, se limitó a definir la marcha como una "cuestión política" propia del año electoral y sostener que "los que la encabezaron participan en los actos de la oposición".
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La Policía correntina reprimió la movilización esta mañana en la capital provincial, cuando una columna compuesta por representantes de más de decenas de sindicatos y organizaciones sociales, liderada por dirigentes locales de la CGT y la CTA, marchaba hacia la Casa de Gobierno y la Legislatura, separadas sólo por una cuadra.
A las 10.30, en el cruce de las calles Quintana y La Rioja, los manifestantes se habían topado con un vallado y con un fuerte operativo policial dispuesto a 200 metros de la sede gubernamental. Los agentes de la fuerza de seguridad, en esa intersección, intentaron evitar el paso de la columna y, de inmediato, comenzó un forcejeo entre manifestantes y policías, quienes arrojaron luego gases lacrimógenos y aplicaron golpes con bastones.
El secretario general del Sindicato de Trabajadores Viales de Corrientes, Ramón Cristaldo, denunció en declaraciones a la prensa que hubo "heridos" y precisó que algunos de los lesionados formaban parte del Centro de Jubilados y Pensionados de la Provincia.
"Se ha terminado la democracia: no respetan el derecho a manifestarte", enfatizó el jefe sindical.
Por su parte, el secretario general del Sindicato de Trabajadores Judiciales de Corrientes, Juan Carlos González, se mostró "sorprendido por la actitud del gobernador", a quien acusó de "mandar a reprimir" a los manifestantes.
El gremialista, en diálogo con la radio local FM Puerto del Sol, consideró que "el primer mandatario provincial, evidentemente, no ve la realidad o no la quiere ver".
Cuando los policías mitigaron su accionar, los diputados justicialistas María Inés Fagetti, Tamandaré Ramírez Forte y Luis Badaracco, al igual que el senador radical Noel Breard, mediaron para evitar la multiplicación de incidentes.
Dijeron a los uniformados que se trataba de "una marcha pacífica", tras lo cual los efectivos retiraron el vallado y permitieron el avance de la columna.
Colombi, poco antes de la marcha, había tensado la situación al sostener en declaraciones a la prensa que "no hay que andar por la calle llorando como bebés por cosas que no son ciertas y no se ajustan a la realidad", al aludir a los reclamos salariales.
Cristaldo, en medio de la marcha, replicó: "No estamos llorando como niños: estamos reclamando lo que nos corresponde. Lo que pasa es que Colombi ve fantasmas donde no los hay porque no somos influidos por ningún partido, sino por el reclamo genuino de las bases".
Este mediodía, dirigentes la Confederación General del Trabajo (CGT) y la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) leyeron frente a la Casa de Gobierno provincial el petitorio unificado.
