El viaje que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner realizó el fin de semana en apoyo al depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya (quien a pesar del apoyo de la OEA no pudo volver a su país), fue criticado por varios referentes de la oposición, que lo tildaron de improvisado e innecesario.
El que lanzó la primera piedra fue Mario Das Neves, gobernador de Chubut, quien dijo que le parecía " una puesta en escena muy desorganizada" y consideró que "la presencia de la señora presidenta de en el país hoy por hoy es mucho más importante que en estos momentos de estar en El Salvador viendo si va a entrar a Honduras o no". Pero él no fue el único.
Juvenilia k. "Ni Bachelet, ni Lula, ni Tabaré Vázquez, ni Calderón, ni Uribe, ninguno de nuestro vecinos se ha comprometido en estos temas; aquí tenemos problemas inmensos como la gripe porcina, la crisis, el desempleo", sostuvo en diálogo con Perfil.com el ex candidato presidencial Ricardo López Murphy, quien condenó el golpe al sostener que los problemas nunca se resuelven con una "patrulla".
Para el ex radical, los argentinos "necesitamos que [Cristina] esté gobernando". En ese orden, comparó el viaje de CFK con la aventura fallida de Kirchner en la operación de rescate a Ingrid Betancourt. "Es la misma juvenilia", sentenció y apuntó al Gobierno por no entender las graves consecuencias que acarrea la gripe A en materia económica.
Investidura presidencial devaluada. "Me parece bien la preocupación por la democracia en el continente, pero aquí el principal problema es que no hay gobierno y los ministros son simples máscaras de las decisiones de la presidenta o el ex presidente en funciones", expresó a Perfil.com el diputado de la Coalición Cívica, Fernando Iglesias. "Si esto fuera un país organizado, presidido por una presidenta y no por el marido, donde los ministros no formaran parte de un gabinete inexistente, no estaría mal que un viaje", dijo.
"Esta mal que, en medio de graves problemas como la gripe A, y una crisis política, viaje quien ha concentrado todo el poder en su persona", deslizó Iglesias, para quien la misión de Cristina es similar a la de Kirchner por "lo improvisado y por la falta de coordinación".
"La ausencia de líderes regionales como Lula, Bachelet, lo dice todo", describió y aseveró que "los Kirchner claman siempre por el respeto a la investidura presidencial y a veces la embarcan en estas aventuras", que, opina, devalúan esa misma investidura que ellos reclaman respetar.
Gesto intrascendente. Por su parte, el ex embajador argentino en Washington, Eduardo Amadeo, le dijo a Perfil.com que, en el plano local, el gesto de Cristina le pareció una actitud innecesaria. "La presidenta da toda la intención de que fue buscando una foto que la levantara en la consideración pública; en Argentina existen temas mucho más preocupantes", señaló.
El elector diputado nacional por Unión-PRO e integrante del Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales agregó que en el plano internacional también fue intrascendente. "No sólo por el fracaso de la misión, sino también porque la defensa de la democracia e institucionales podría lograrse en el ámbito de la OEA, Argentina podría haber emitido un comunicado muy duro sin necesidad de que la Presidenta dejara de lado sus obligaciones locales", lanzó.
En este punto, diferenció este hecho del que protagonizó Néstor Kirchner en Colombia. "En aquel momento, Kirchner no tenía responsabilidades de Estado, yo estaba de acuerdo, me parecía posicionamientointernacional de la Argentina; en este caso la presencia de Cristina fue intrascendente", repitió.
(*) Redactor de Perfil.com