La presidenta Cristina Kirchner insistió hoy con el reclamo a Gran Bretaña para que acepte sentarse a la mesa de negociaciones por la soberanía de las Islas Malvinas, en concordancia con la resolución 2065 de ese organismo, al sostener que "los países que se presentan ante el mundo como civilizadores son los que deben dar el ejemplo".
Además, la Presidenta instó a las autoridades de Naciones Unidas y a los países miembros de la organización que desplieguen "un rol más activo" para que Gran Bretaña acepte sentarse a la mesa de negociaciones en torno al conflicto por la soberanía de las Islas Malvinas.
Durante el almuerzo en honor de la visita del titular de la ONU, Ban Ki-Moon, la jefa de Estado sostuvo que "es hora que los países que tienen un lugar importante porque integran el Consejo de Seguridad o son parte del Grupo de los Ocho, también convenzan al resto del mundo que están sujetas a normas internacionales, sino es un doble estándar".
Durante su alocución, Fernández sostuvo que la guerra de 1982 en el archipiélago "es un hecho no imputable a los argentinos, sino a una dictadura", al tiempo que sentenció que el país "en materia de paz, de desarrollo sustentable y de respeto irrestricto a los derechos humanos y condena a la impunidad constituye uno de los ejemplos más importantes del mundo".
"La Argentina tiene un alto grado de coherencia en la construcción de la paz. Hemos sido siempre respetuosos de las resoluciones de las Naciones Unidas", por lo que instó a que "las dos partes se sienten a negociar", a la vez que sentenció que "pocas cosas necesiten menos explicación que esa resolución".
Cristina También recordó que "el año próximo se cumplirán 30 años de lo que sucedió en 1982 durante la última dictadura militar" y remarcó que "lo que sucedió no puede ser imputable a los argentinos, porque las primeras víctimas de esa dictadura fueron los argentinos".
Asimisma, la Jefa de Estado criticó que "Inglaterra ha desoído sistemáticamente esta resolución de las Naciones Unidas" por la cual debe sentarse en una mesa con Argentina a dialogar sobre la soberanía de las Malvinas.
No obstante, la jefa de Estado le pidió disculpas por los inconvenientes ocasionados en su viaje por las cenizas del volcán Puyehue, que lo obligó a trasladarse por tierra desde Córdoba a Buenos Aires, pero bromeó con que las cuestiones climáticas no se pueden controlar "ni siquiera con un decreto de necesidad y urgencia".
El secretario general, quien llegó esta madrugada al país, fue recibido por la Presidenta en el Despacho Presidencial de la Casa de Gobierno, y luego compartieron un almuerzo en el edificio oficial, junto a los ministros Aníbal Fernández, Florencio Randazzo y Héctor Timerman, el titular del Senado, José Pampuro, el gobernador bonaerense Daniel Scioli, y el embajador ante la ONU, Jorge Arguello.
Fuente: DyN.