Desde la ESMA y visiblemente emocionada, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció el envío al Congreso de un proyecto de ley para eliminar el delito de "calumnias e injurias" para los periodistas, como una medida para garantizar la plena libertad de expresión.
La presidenta, que encabezó un acto en conmemoración de los 30 años de la visita de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, afirmó que "no ha habido mayor libertad para hablar del gobierno de un pais que durante el gobierno de la primera presidenta mujer en la Argentina", en referencia al suyo.
Cristina expresó que su intención de suprimir este delito busca garantizas la "libertad decir lo que uno quiera decirlo, aunque sea un mentira" y agregó que "prefiero mil millones de mentiras antes de ser la responsable de cerrarle la boca a alguien". Y sentención: "Nunca hubo mayor libertad de prensa en un Gobierno".