Mientras la investigación que envuelve a Lázaro Báez se come las tapas de los diarios y suma minutos de aire y radio, el empresario kirchnerista Cristóbal López avanza en silencio con un meganegocio que lo ayudaría no sólo a lavar su imagen sino a ganar poder real en la grilla de la TV, algo que pocos empresario de medios dependientes de la publicidad oficial lograron hasta ahora.
Dueño del Grupo Indalo, que controla Radio 10 y C5N, avanza con las negociaciones para controlar Ideas del Sur, la productora de Marcelo Tinelli. El objetivo final sería lanzar una canal de cable propio enfocado al entretenimiento, con humor, música y programas a la tarde con el aura de Tinelli. Alta definición, pero sin política. Dato no menor en un año electoral donde el Gobierno se juega la posibilidad de controlar el Congreso, vital para su gobernabilidad hasta 2015. López piensa en su futuro. Con o sin kirchnerismo en el poder.
Con una inversión despreciable para el volúmen de negocios de su imperio, que factura 12 mil millones por año (sin el juego), el empresario alcanzaría un objetivo dual al controlar un canal masivo: evitar convertirse en “el Báez de los medios” –sus señales repelen la audiencia, según las últimas mediciones– y además, edificaría un apetitoso negocio vinculado al entretenimiento. Se teje por estos días un plan para limpiar su nombre. El primer golpe sería una entrevista que le daría a un prestigioso periodista, que todas las semanas ensaya monólogos delante de un telón rojo.
Al menos tres importantes empresarios de medios confirmaron a PERFIL que las negociaciones están avanzadas. Se enteraron porque ellos estaban interesados en comprar Ideas. Algunos, incluso, hicieron ofertas. En una reunión a uno de ellos le pidieron US$ 40 millones por el 70% que le pertenece a Tinelli (el otro 30% es del Grupo Clarín). El empresario sonrío y canceló en ese instante las negociaciones. “Es mucho dinero para una compañía que no factura”, se disculpó.
“Cristobal se va quedar con Ideas”, confían muy cerca de López, pero aclaran que la empresa no vale tanto, apenas la mitad de esa cifra, unos US$ 20 millones. Oficialmente, los voceros negaron las versiones con la tenacidad de quién debe transmitir un mensaje.
Marcelo Tinelli demostró con las décadas que lleva en la piel la fórmula para manufacturar éxito. Si decididera lanzar su propio canal de cable, no tendría problemas. Apenas debería presentarse en la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual, Afsca, y hacer los trámites para que tener su señal. Existen algunas exigencias operativas y técnicas. Pero tiene luz verde y cualquier obstáculo se resuelve con un llamado. Después, debería encarar las negociaciones con los operadores de TV paga (Cablevisión, Telecentro, Direct TV) para “venderles su señal”. ¿Quién se negaría a transmitir el canal de Tinelli?
Hay un dato no menor en la guerra por capitalizar su imagen: Las autoridades de Canal 13 confirmaron que el conductor no será parte de la grilla de este año. “Ya tenemos toda la programación armada y Marcelo no está”, aclaran. ¿Estarán presionando públicamente al conductor para que vuelva al Grupo, pero en inferiores condiciones de negociación?
No resulta casual que en un año electoral, clave para la continuidad del kircherismo, Tinelli no tenga pantalla. Ideas del Sur no sólo es una de las productoras más importantes, es además, un muy veloz y efectivo disparador de la imagen de cualquier candidato. No es necesario memorizar plataformas que nunca se cumplirán, apenas hay que soltarse para bailar y jugar con el conductor al aire. El efecto es inmediato: sube el conocimiento y se potencian las chances de hacer una mejor elección. Casi científico. En la cúpula de cualquier espacio político hoy “estar en lo de Tinelli” es un variable vital para pensar una campaña. En el Gobierno no convencía la idea de repetir el mal trago de 2009, cuando Francisco De Narváez sumó en poco tiempo popularidad y derrotó a Néstor Kirchner, el padre del Modelo.
Cerca de Tinelli arrojan escenarios coincidentes. No creen que volverá a la pantalla en 2013, a lo sumo a principios de 2014. Pero ya resulta una discusión menor porque el plan del canal propio, impulsado por López, es concreto. Uno de los hombres de mayor confianza de Tinelli tiene diseñada la programación de un canal de cable desde hace meses. Explican que hoy Ideas puede costar unos U$S 20 millones.
Algunos empresarios se ofuscan con estas versiones. Juran que la operación se concretó hace un mes, aunque cerca de Tinelli lo niegan. Aparecería una tercera compañía, que oficiaría de “intermediaria” . Sería “la cara de la venta” para evitar que el nombre de Cristóbal aparezca en la operación.
López esconde una jugada. Cuando compró el grupo de medios de Daniel Hadad, heredó el Canal 27, una señal de UHF en HD que podría transmitir hasta cuatro canales de televisión digital de aire. Cubre desde Tigre hasta la Plata. Ese canal ocupa un espacio vital del espectro que el Gobierno necesita para expandir la tenue oferta de señales de Televisión Digital Abierta. ¿Lo convertirá López en la puerta de entrada para su propio canal de entretenimiento?
