“Los debates son como un partido de fútbol, los equipos pueden estar muy preparados pero siempre hay algo inesperado que le termina dando la victoria a uno u otro”. La reflexión pertenece a Ricardo Boechat, un periodista brasileño con larga experiencia como moderador de los debates presidenciales que organiza la Red Bandeirantes desde 1989. Mientras en la región ya es una norma, en Argentina aún nunca hubo un debate presidencial.
De todos modos, son muchos los que se preguntan si los debates tienen sentido, sobre todo con la preparación y el entrenamiento con el que llegan los candidatos. Los especialistas suelen repetir recetas a sus clientes: no agredir, no entrar en discusiones acaloradas, no ahondar en explicaciones y repetir siempre conceptos positivos, con propuestas y muestras de optimismo. “Con fe, con confianza”, “Juntos, en equipo” o referencias constantes a lo que supuestamente quiere “la gente” son muletillas típicas.
Esta semana, la organización Argentina Debate preparó una serie de encuentros con especialistas internacionales en debates presidenciales. Dieron sus puntos de vista expertos de Estados Unidos, Brasil, Chile y Perú. Marty Slutsky es el productor general de la Comisión de Debates Presidenciales de Estados Unidos (CPD). Para él, “no hay que subestimar el análisis del público”. “Si un candidato repite un mismo discurso, es el público el que va a hacer su propio juicio, y no sólo los medios”, explicó.
Para Marcelo Hilsenrad, gerente de operaciones de Canal 13 de Chile, “los candidatos llegan muy preparados, por eso el rol del moderador es clave para buscar la sorpresa”. Coincidió con Janet Brown, directora ejecutiva de la CPD, para quien mientras más pautadas estén las reglas, “más chances de que el candidato pueda repetir un discurso”.
Después de cada debate, la discusión sobre quién lo ganó varía según quien lo analice. El miércoles último, los equipos de Martín Lousteau, Horacio Rodríguez Larreta y Mariano Recalde se fueron del canal TN conformes con el desempeño de su candidato. Aunque el propio Larreta confesó que se vio obligado a responder las críticas y no pudo “ampliar las propuestas”.
“Nada como los debates saca a los políticos de su área de confort”, sostiene Boechat. “La noticia es lo que pasa y también lo que no pasa”, asegura Hilsenrad. Charles Gibson fue moderador de debates históricos en Estados Unidos y considera que en su país “son los eventos más importantes del proceso electoral”. Junto a sus colegas reiteraban la importancia de que se vuelva una costumbre también en la Argentina.
Con vistas a octubre
Esta semana, representantes de Daniel Scioli se sentaron por primera vez en las mesas de negociación en las que la agrupación Argentina Debate (que nuclea a diversas organizaciones no gubernamentales) está avanzando para que este año por primera vez todos los candidatos presidenciales participen de un debate.
La fecha fijada es el domingo 4 de octubre, en la Facultad de Derecho de la UBA. Ya hay un acuerdo entre los canales de aire privados para que transmitirlo en conjunto. Desde la organización confían en que la TV Pública también se sume.
El objetivo es que se puedan alcanzar acuerdos “transparentes y confiables” para todos. También un equilibro en los temas a debatir.