Aerolíneas Argentinas vuela por cielos de incertidumbre: en medio de una crisis financiera y con sus trabajadores en continuas asambleas que podrían derivar en paros, ahora peligra la operación para rescatarla. El empresario naviero Juan Carlos López Mena, que parecía dispuesto a comprar parte de las acciones, ya no aparece como un posible "salvador" y las soluciones se alejan, según informó hoy el diario La Nación.
Mientras algunas fuentes aseguraron al matutino que la venta se concretará, otras sostienen que llevará más tiempo de lo que se creía. La operación "está dentro de los plazos previstos", aseguró Jorge Molina, vocero de Aerolíneas, al diario de la familia Mitre, y agregó que tres consultores estaban trabajando para evaluar el valor y el estado del activo de la empresa. "En los próximos días vamos a tener los resultados", aseguró.
Molina no niega, sin embargo, que la compañía tenga problemas de caja."Por supuesto que hay inconvenientes, eso no es nuevo: todas las aerolíneas del mundo tienen problemas. Este año, casi 40 dejaron de volar", afirmó, aunque luego reconoció que las medidas que tomó el Gobierno dieron cierto alivio al mercado doméstico.
Es que desde que se anunció el acuerdo con López Mena, hace unos 40 días, el Estado decidió ayudar al negocio: autorizó un aumento de tarifas, modificó el régimen de compensaciones para las rutas no rentables y otorgó un subsidio al combustible, entre otras decisiones.
El grupo español Marsans, que controla la aerolínea, no parece muy convencido al respecto: hace unos días trasladó al CEO de la empresa, Enrique Meliá, de vuelta a España, dejando a Aerolíneas Argentinas sin ningún gerente general.
Ocurre que Aerolíneas necesita efectivo para volver a operar con normalidad, y el método de compra de una empresa en tiempos kirchneristas no contempla esa posibilidad: como ocurrió con YPF, la propia compañía debe repagar el precio con adelanto de utilidades, ganancias y con reparto de dividendos, según sostiene el diario La Nación. Es decir que jamás ingresa dinero contante y sonante.
Desde que el Gobierno decidió impulsar la "argentinización" de la aerolínea, siempre se mencionó al presidente de Aeropuertos Argentina 2000, Enrique Gutiérrez, como posible comprador. La empresa del grupo Eurnekian negó tener algún interés; ahora que la operación con López Mena se complicó, varios vuelven a mirar para ese lado en busca de una salida, afirmó el matutino.