La querella que representa a Zulema Yoma denunció que hubo "manipulación" del cadáver de Carlos Menem Jr. al detectar presuntas diferencias entre los primeros informes del cuerpo del hijo del expresidente y las necropsias posteriores.
El abogado Juan Gabriel Labaké examinó junto a los peritos Jorge Locles, criminalista, y Federico Foresi, médico legista, "detenidamente" la prueba existente en el Juzgado de San Nicolás sobre "los estudios que se le realizaron a Carlos Menem (h) en el Hospital San Felipe de esa ciudad, en los últimos minutos de vida y que se prolongaron hasta poco después de su muerte", y los compararon "con los resultados de la necropsia que se practicó un año y tres meses más tarde".
Labaké sostiene que "entre ambos estudios existen elementos de juicio, prácticos, observables, comprobables y evidentes, que hacen sospechar que el cráneo sobre el cual se practicó la necropsia no pertenece realmente a Carlos Saúl Menem (h)".
Según denunciaron, hay diferencias en las piezas dentales: en los resultados del hospital se consignó que Menem Jr tenía sus maxilares intactos y su dentadura completa, mientras que en el estudio posterior aparece el cuerpo con ambos maxilares sueltos sobre el cráneo, sumado a que el inferior estaba partido en dos; y del superior sólo quedaban dos trozos, mientras que estaban ausentes la parte media y sus seis dientes.
Tanto la perito de parte, la odontóloga Beatriz Maresca, como Foresi y Locles coincidieron en que: "el estado en que se encontraron las mandíbulas de Carlitos sólo puede explicarse por la intervención de alguien que las extrajo voluntariamente y con la ayuda de algún instrumento o herramienta"; "puede asegurarse que tales trozos de mandíbula pertenecen a quien en vida fuera Carlos Menem (h), porque así lo demuestran las similitudes existentes entre las radiografías tomadas en los últimos momentos de su vida, y las obtenidas en la necropsia; pero no hay indicio alguno de que el resto del cráneo y aún del cuerpo (salvo la pierna izquierda) que apareció en el cajón sea también de Carlitos".
"Todo indica que, al menos el cráneo examinado por los 36 eminentes médicos que realizaron la necropsia, no pertenece a Carlos Menem (h)", señalaron.
En diálogo con radio Mitre, Labaké aseguró que "la mandíbula superior izquierda estaba arrancada con algún instrumento con el cual tironearon" como si se tratara de "una pinza".
"Yo tengo la obligación de no sospechar de nadie, pero puedo tomar precauciones. Si hacemos un ADN para compararlo, lo vamos a hacer sobre todo lo que nosotros elijamos del cadaver que está sepultado
y no sobre aquello que 36 médicos sacaron en la morgue".
"Lo de la pierna derecha es raro también. Tenía una bota de yeso en la necropsia, ¿pero a qué moribundo se le pone una bota de yeso?", se preguntó.
"Todo el cuerpo médico de la morgue nacional lo revisó, pero algún pícaro hizo cambios en este cadáver. Nuestra hipótesis es que esos 36 médicos no mintieron sino que les presentaron un cráneo que no era el de Carlitos. Vamos a pedir una exhumación para hacer una ADN pero Zulema ahora está con mucho stress. Imagínense, le profanaron el cadaver de su hijo", dijo en el contacto radial.