Algo que parecía imposible hace unos meses ahora se volvió realidad: el Gobierno convocó a una reunión a los sectores agropecuarios. Y esta vez esperan que no sea para la foto. Según informó Clarín, la Mesa de Enlace impulsa un proyecto para bajar retenciones que tendría en 2010 un costo fiscal cercano a U$S 3.180 millones.
Por su parte, el Gobierno considera una reducción a 0% del tributo para los cereales y una sensible baja en el girasol, pero no quiere bajar las retenciones a la soja. La diferencia con la Mesa de Enlace es sustancial, ya que de esta manera el costo sería de US$400 millones, muy lejos de lo que pretende el agro.
Los partidos políticos opositores están en el medio de las dos propuestas. La UCR considera que el reclamo rural es exagerado y prepara un proyecto propio. Por su parte, PRO y el peronismo disidente están más cerca de la posición del campo.
Si bien todos los partidos opositores estuvieron unidos durante el conflicto campo-Gobierno, lo cierto es que el costo fiscal que supone la baja a retenciones hace que la posición, esta vez, no sea homogénea.
Postura. La semana pasada, la Mesa de Enlace presentó un proyecto de ley que busca bajar a cero del tributo al trigo, el maíz y el girasol, así como una reducción de 10 puntos en las retenciones a la soja, del actual 35 al 25%.
La diferencia es importante. Actualmente la soja tributa 35% de retenciones y sus derivados 32%. Si no hay modificaciones, su aporte a las arcas fiscales podría llegar a U$S 7.800 millones el año entrante. Si se descuentan esos 10 puntos, los ingresos derivados del cultivo caerían a 5.400 millones.
Se preparan. Según informó La Nación, miles de productores se encontrarán hoy en el predio de la Rural, en Palermo, para asistir a la presentación oficial de los legisladores electos de extracción ruralista.
En la reunión estarán presentes los representantes de la Mesa de Enlace: Hugo Biolcati (Sociedad Rural), Eduardo Buzzi (Federación Agraria), Mario Llambías (Confederaciones Rurales Argentinas) y Carlos Garetto (Coninagro).