Un jury de enjuiciamiento desplazó de su cargo de fiscal de Estado de Mendoza a Joaquín de Rosas, acusado de haber favorecido durante su gestión al grupo de los empresarios Daniel Vila y José Luis Manzano.
Por amplía mayoría, el tribunal determinó que De Rosas no defendió como correspondía los intereses de la provincia cuyana en el proceso de compensación de tierras expropiadas en la zona de Divisadero Largo, publicó el diario Clarín.
16 de los 18 miembros del tribunal, integrado por jueces de la Suprema Corte, magistradas subrogantes y legisladores provinciales, votaron por la remoción del fiscal de Estado, un hecho calificado de inédito en democracia.
De Rosas permanecía suspendido desde agosto del año 2012, señalado por beneficiar al poderoso grupo empresario en una causa compleja y con varias ramificaciones: en 2001, la firma Dalvian, propiedad de Vila, había solicitado compensar sus deudas de casi 6 millones de dólares con los extintos bancos provinciales con el monto que la Provincia debía abonarle por la expropiación de tierras para la creación de una reserva natural.
En el proceso que culminó en la destitución del fiscal quedó claro que De Rosas se hizo cargo personalmente de ese caso, que provocó las quejas de otros propietarios de terrenos ya que mientras ellos recibieron 2,76 por metro cuadrado, a Vila le pagaron entre 13 y 17 pesos, informó Clarín.