La noticia de la muerte del ex presidente Raúl Alfonsín atravesó las fronteras de la Argentina. Por eso muchos Estados nacionales enviaron sus pésames e incluso hubo ex presidentes que lo recordaron personalmente.
Durante 1984 viajó a España, a la tierra de sus ancestros y como presidente democrático. Allí lo recibió el por entonces Gobierno socialista de Felipe González. Hoy el partido emitió un comunicado en el cual expresaron " su pesar y sus condolencias" por el fallecimiento de Alfonsín.
"Para el PSOE, Alfonsín ha sido un gobernante clave no sólo para su país sino también para toda América Latina, ya que logró normalizar la situación política, afianzar la democracia y el funcionamiento de las instituciones"
"Además de por sus profundas convicciones democráticas y su lucha en favor de la libertad, a Raúl Alfonsín siempre le recordaremos también como a un dirigente político que mantuvo una relación especial, de cariño y sintonía, con España y con el entonces Gobierno socialista de Felipe González"
Rodríguez Zapatero, actual mandatario español sostuvo que "su figura será siempre recordada como la de un insigne político y un gran presidente defensor de los derechos humanos, que contribuyó de manera decisiva a la consolidación de la democracia en vuestro país".
Rodríguez Zapatero también dijo que Alfonsín "constituyó un ejemplo de empeño y dedicación a los intereses generales de la nación argentina" y destacó que fue "un gran amigo de España" y que trabajó "a favor de las relaciones entre nuestros dos países, contribuyendo al estrechamiento de los fuertes lazos que hoy existen".
Por su parte, el gobierno de México lanzó un comunicado para expresar "sus más sinceras condolencias" al gobierno y al pueblo argentino "por el sensible fallecimiento". " Su trabajo fue esencial para la consolidación democrática e institucional de esa nación". Señaló también que "reconoce el liderazgo" de Alfonsín "en el fomento del diálogo y la concertación en América Latina".
El ex presidente de Chile Patricio Aylwin (1990-94) señaló sentirse dolido por la muerte del ex mandatario. Aylwin, que al igual que Alfonsín en su país fue el primer presidente en restaurar la democracia tras una cruenta dictadura militar, recordó el "enorme espíritu social" del fallecido mandatario.
"Me duele el fallecimiento de Raúl Alfonsín, era un hombre del que yo esperaba viviera más", sostuvo emocionado el ex presidente Aylwin. "Mantuvimos nuestra relación durante mucho tiempo. Cuando ascendí a la Presidencia vino a visitarme y fortalecimos nuestra amistad y el compromiso por la lucha por la libertad y la democracia en nuestros países".
El ex presidente brasileño José Sarney expresó en declaraciones telefónicas a un canal local de televisión su profunda "conmoción" por la muerte de Alfonsín, a quien se refirió como un "amigo, un gran estadista, con un coraje enorme" y "una de las figuras humanas mayores que he conocido".
Julio María Sanguinetti, ex presidente de Uruguay y amigo personal de Alfonsín, también lo recordó: "su figura representa la honradez cívica y la convicción democrática", dijo Sanguinetti antes de calificar al ex mandatario argentino como "un pacificador que reinstaló las buenas relaciones con sus vecinos".
"Sentía profundamente la democracia como instrumento para la libertad", subrayó el veterano político uruguayo. Recordó con una sonrisa que fueron "grandes amigos" pese a que se trenzaban en discusiones sobre muchos temas en los que tenían visiones distintas. " Yo solía decirle que era un gallego porfiado", matizó.
Desde el gobierno paraguayo, el vicepresidente Federico Franco – a cargo del Poder Ejecutivo- expresó las condolencias del pueblo y gobierno de ese país y consideró que el fallecimiento de Alfonsín "constituye una gran pérdida para toda Latinoamérica".
Franco se comunicó telefónicamente esta mañana con el vicepresidente Julio Cobos, a cargo interinamente del Poder Ejecutivo, anunciándole el envío de una delegación con representantes del gobierno y el parlamento paraguayo para el sepelio del ex presidente argentino.