De repetirse en octubre los resultados de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias de ayer, el Frente para la Victoria perdería el quórum propio en el Senado. En la Cámara de Diputados, el oficialismo quedaría en idéntica situación a la actual.
El bloque de senadores del kirchnerismo, en realidad, tendría una banca más que en la actualidad, pero pedería por lo menos cuatro aliados, por lo que quedaría con un total de 36 senadores, uno menos que el quórum. Esto quiere decir que para impulsar los proyectos propios, el oficialismo deberá negociar con otras fuerzas o con algunos bloques menores.
La oposición, de todas formas, quedaría en una situación compleja ya que sufriría una mayor dispersión. El radicalismo perdería dos bancas y el Peronismo disidente y el FAP, una. Aparecerá en el Senado el bloque del PRO, con uno o dos senadores por la Capital y peleará por entrar también Alfredo De Angeli desde Entre Ríos (de repetirse el resultado de las PASO lo conseguiría).
La situación más complicada para el kirchnerismo se daría en Neuquén. Allá pone en juego dos bancas propias y una de los aliados del MPN. Sin embargo, ayer una lista opositora al Gobierno nacional ganó la interna del MPN, por lo que esa bancada, que probablemente sea de dos senadores, jugará en el bando de la oposición. Y el kirchnerismo deberá luchar por la banca de la minoría con el radicalismo.
En Capital también sufrirá un retroceso importante. De los tres senadores actuales, uno es kirchnerista (Daniel Filmus) y otro aliado (Samuel Cabanchik). Con los resultados de ayer, la oposición se quedaría con todo lo que se pone en juego. Las buenas noticias para el Gobierno llegarían desde las provincias de Salta y Santiago del Estero, donde el kirchnerismo podría sumar una banca más en cada una. En Tierra del Fuego, el Frente para la Victoria se impuso ayer, por lo que se quedaría con dos bancas, pero en la actualidad las tres bancas son propias o aliadas. La cuenta total le daría negativa.
En Diputados se daría un fenómeno similar. El bloque del Frente para la Victoria crecería: en la actualidad cuenta con 105, y según los números de las PASO subiría a 114. Pero la merma sería entre los aliados, que caerían de 28 a 19. En total el oficialismo llegaría a los 133 diputados, apenas cuatro más del quórum propio, situación que puede variar a medida que se vayan dando los nuevos realineamientos políticos de cara al 2015.
Entre los opositores, el radicalismo seguiría conservando la primera minoría, con dos diputados más que la actualidad. El PRO también evidencia un crecimiento, y el Frente Renovador, de Sergio Massa contaría con una bancada de doce miembros.