El juez federal Julián Ercolini y el fiscal Gerardo Pollicita estudiaban las medidas a tomar en la causa por la denuncia de supuesta asociación ilícita contra el ex presidente Néstor Kirchner, luego de la declaración del ex embajador argentino en Caracas Eduardo Sadous, en donde se reveló el supuesto pago de coimas por negocios en Venezuela.
En ese sentido, fuentes judiciales indicaron que el juez ordenaría la citación a los funcionarios y empresarios mencionados en el expediente, a la luz de las declaraciones de Sadous. El diplomático dijo el martes pasado ante Ercolini y Pollicita que los empresarios que querían hacer negocios con Venezuela en el inicio del kirchnerismo le dijeron que tenían que pagar entre un 15 y un 20 por ciento de coimas a funcionarios del Ministerio de Planificación.
Es por ello que tanto el juez como el fiscal consideran clave citar a estos empresarios involucrados para saber si respaldan esas versiones. Sadous también dijo en su declaración que miembros del Gobierno se habrían beneficiado con testaferros en los negocios hechos con Venezuela, y que el ex funcionario del Organo de Control de Concesiones Viales (OCCOVI) Claudio Uberti actuaba como un funcionario para-oficial de la Cancillería. Ayer, por lo pronto, dos de esos empresarios involucrados desmintieron públicamente los dichos de Sadous.
En noviembre de 2008 la Coalición Cívica acusó a Kirchner de encabezar una supuesta asociación ilícita junto al ministro de Planificación, Julio De Vido, y a Uberti, con un grupo de funcionarios y empresarios. En esa denuncia se pidió investigar las obras públicas más importantes de los últimos tiempos del kirchnerismo, entre ellas un fideicomiso multimillonario con Venezuela que ahora fue puesto bajo la lupa.
Este fideicomiso es sólo uno de los capítulos que abarca la megadenuncia que instruye el juez Ercolini, junto al hasta ahora frustrado proyecto del tren bala, el negocio de los juegos de azar y la concesión de la explotación del petróleo.
Fuente: DYN