Este miércoles, Ariel Frenetovich asumirá el Ministerio de Asuntos Agrarios de la provincia de Buenos Aires. Y a poco de dejar su lugar en el municipio de Chivilcoy, este hombre ligado a Florencio Randazzo sumará una nueva polémica: en su ciudad, una ordenanza municipal impide el establecimiento de supermercados extranjeros que no acrediten, como mínimo, cinco años de permanencia.
Bajo la excusa de "cuidar al comerciante local", el titular de la Cámara de Comerciantes Minoristas y trabajadores independientes de Chivilcoy, Hernán Vairo, viene defendiendo esta iniciativa - apoyada por el propio Franetovich - sin vueltas: "Lo vamos a impedir con las herramientas que tengamos, en este caso la ordenanza". Y añade, como justificativo, al diario La Razón de Chivilcoy: "Ningún supermercado puede competir con el precio de bebidas de los chinos, por ejemplo. Los chinos no están exentos de pagar impuestos y demás, lo que sucede es que China les subsidia, aunque no se sabe bien como es ese tema".
La polémica está abierta y reúne condimentos difíciles habida cuenta de la carga xenófoba que propalan los comerciantes locales: "Prohibido la entrada a gente ajena a Chivilcoy. Cuidemos el comercio de Chivilcoy", rezaba uno de los carteles que armaron los comerciantes locales.
El decreto número 245 dispone una prórroga de 180 días para la habilitación de comercios que no puedan probar al menos cinco años de residencia en el lugar. El punto es que, dicha iniciativa, fue auspiciada y promovida por el propio Franetovich que dijo llevarla adelante porque "ésto es bueno para el crecimiento y la economía local". A tal punto llega la oposición a los negocios chinos que Vairo ha llegado a dudar incluso de la higiene, seguridad y limpieza de los mismos: "Los chinos son lamentables", espetó al diario de la ciudad.
Con esta medida avalada en Chivilcoy y con el conflicto del agro asomando la cabeza , Franetevovich desembarcará mañana en su nuevo cargo.