POLITICA
"Hola, soy Jorge"

El Papa llamó por sus asuntos pendientes

default
default | Cedoc

“Hola, soy Jorge. ¿Cómo venía mi agenda esta semana? Me acuerdo que teníamos que definir la licencia de un sacerdote... ”. El teléfono sonó el jueves a la mañana en la sede del arzobispado de Buenos Aires. La llamada fue atendida en el despacho del obispo auxiliar de la ciudad. Y la voz al otro lado de la línea era Jorge Bergoglio, el Papa argentino que seguía preocupado por resolver pequeñas cuestiones de su puesto anterior.
Un día después de ser elegido jefe mundial de la Iglesia Católica, Francisco se comunicó por teléfono con su hombre de mayor confianza. Se trata de Joaquín Mariano Sucunza, vicario general a cargo de la arquidiócesis porteña y –en la práctica– mano derecha del cardenal latinoamericano que llegó al trono de San Pedro.
Según confirmó una fuente religiosa a PERFIL, el pontífice mantuvo un breve diálogo con su ex colaborador. El objetivo de la charla fue repasar en detalle –punto por punto– los distintos asuntos pendientes de su tarea en la Argentina, desde cuestiones administrativas hasta el pedido de licencia de un clérigo. Al mismo tiempo, le impartió claras instrucciones sobre cómo proceder en cada caso.
La anécdota sirve para ilustrar el estilo minucioso y obsesivo de trabajo de Bergoglio. El mismo que a partir de ahora aplicará en la Santa Sede del Vaticano y que deberá utilizar para solucionar problemas más importantes, como los enormes desafíos de la institución que ya está liderando.