El papa Francisco envió una carta al pueblo argentino en la que dejó de lado los formalismos y expresó una cercanía hacia los ciudadanos de su país de origen. Fue su modo de responder a los mensajes de felicitaciones que recibió por cumplir cinco años como jefe máximo de la Iglesia católica. El encargado de transmitir el mensaje fue monseñor Oscar Ojea, titular de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA). “Quisiera decirles que el amor por mi Patria sigue siendo grande e intenso”, expresó el pontífice. También pidió “perdón” a “quienes puedan sentirse ofendidos por algunos de mis gestos”. Aclaró que su “intención es hacer el bien” y que a su edad, sus intereses “ya tienen poco que ver” con su persona. Así, respondió a quienes le cuestionan diversas acciones, como el envío de rosarios a detenidos o sus encuentros con figuras condenadas por corrupción, como el ex presidente Carlos Menem. En su misiva Francisco buscó, a su modo, explicar las razones que lo hacen sentirse cercano al país a pesar de que no se concreta la esperada visita. “Aunque ahora no tenemos el gozo de estar juntos en nuestra Argentina, recuerden que el Señor ha llamado a uno de ustedes para llevar un mensaje de fe, de misericordia y de fraternidad a muchos rincones de la Tierra”, expresó el pontífice, quien además invitó a que “si alguna vez se alegran por cosas que” él “pueda hacer bien” pide que “las sientan como propias”. Es la segunda oportunidad en la que el ex arzobispo de Buenos Aires busca explicar las razones que lo mantienen lejos de su país. En 2016 envió un video en el que también se expresaba con un tono alejado de la solemnidad y con fuerte cercanía. “Ustedes no saben cuánto me gustaría volver a verlos”, dijo entonces, y agregó: “El mundo es más grande que Argentina, hay que dividirse… dejo en manos del Señor que él me indique la fecha”. La carta incluye también un párrafo que no puede dejar de ser leído en el contexto de un debate sobre la posible despenalización del aborto: “Pido por todos ustedes, para que sean canales del bien y la belleza, para que puedan hacer su aporte en la defensa de la vida y la justicia”.
