Luego de maratónica sesión, el Senado convirtió esta madrugada en ley la protección de glaciares, que pone límites al avance de la mineria a cielo abierto y genera por ello roces con las provincias andinas. El que resultó aprobado fue el proyecto del diputado opositor Miguel Bonasso, acordado en su momento con el senador oficialista Daniel Filmus, más exigente con las mineras que el texto aprobado por unanimdad en 2008 y luego vetado por la presidenta Cristina Fernández.
La iniciativa, que traía media sanción de Diputados.apunta específicamente a proteger las cuencas hídricas y limita la minería a cielo abierto imponiendo restricciones en las areas glaciares y periglaciares. La larga lista de senadores que pidieron la palabra, más de 30, hizo que la votación se llevara a cabo poco antes de las 4 de la mañana. Primero se rechazó el proyecto aprobado en 2008 por el mismo Senado (33 votos a favor y 35 en contra), y luego se aprobó el proyecto que venía de Diputados (35 a favor y 33 en contra). En las dos votaciones hubo una abstención, la del senador sanjuanino Roberto Basualdo.
El debate abrió, como se especulaba, brechas en el bloque del kirchnerismo y en el del radicalismo, que terminaron dando libertad de voto a sus miembros. Es que si bien el senador Filmus (Capital Federal) respaldaba la iniciativa tras llegar a un acuerdo con Bonasso, los respresentantes del Frente para la Victoria de numerosas provincias se oponían a que las mineras - extranjeras en su mayoría- se vean perjudicadas por la normativa que pretende controlar la degradación medioambiental que provocan.
En sus discursos, Filmus, el neuquino Horacio Lores y los radicales Alfredo Martínez (Santa Cruz) y Laura Montero (Mendoza) y la fueguina María Díaz, argumentaron a favor de la sanción de Diputados, en tanto que apoyaron la del Senado los oficialistas Liliana Fellner (Jujuy) y Eduardo Torres (Misiones). “Somos un pueblo decidido a seguir conquistando derechos y esta ley preserva un derecho humano como es el acceso al agua”, dijo Filmus.
Como muestra de la diversidad de opiniones que generaba el tema, basta señalar que el jefe de Bloque K, Miguel Angel Pichetto, se definió a favor del proyecto reformado en Diputados, pese a que los funcionarios del gobierno nacional y la mayoría de los gobernadores kirchneristas defendían la propuesta de rechazar esa iniciativa e insistir con el texto del Senado, mucho más permisivo para las mineras multinacionales.
"En todos estos años he sido disciplinado con el Gobierno, entiendo que nuestro Bloque debe apoyar la tarea de Gobierno, pero en este caso la Presidenta nos ha dado plena libertad para votar el proyecto que creamos más conveniente, yo voy a apoyar el que viene con media sanción de Diputados", dijo Pichetto, afirmando que se sentía "orgulloso por el debate que hemos dado en este Senado, porque fue un debate transversal, amplio y trascendente".
El texto aprobado se denomina de "presupuestos mínimos para la protección de glaciares y ambiente periglacial" y consta de 19 artículos, entre los que se destacan la creación de un inventario para individualizar los glaciares y de registro sobre las dimensiones, avances y retrocesos de los ríos de hielo, así como el aporte que hacen al caudal de las cuencas en las que se encuentran.
El martes, una mayoría de ocho legisladores había firmado el dictamen a favor de insistir en el pronunciamiento de Senadores, mientras otros seis suscribieron un proyectos con el apoyo al texto de Diputados, con la sólo excepción del artículo 17, que fue eliminado de la propuesta. La norma señala requisitos para proteger las zonas aledañas a los glaciares y establece prohibiciones de explotación en las regiones periglaciares, así como la realización de una auditoria ambiental a partir de la sanción de la ley para que se evalúen "los impactos ambientales potenciales y generados".
También plantea que "en caso de verificarse impacto significativo, las autoridades dispondrán las medidas pertinentes para que se cumpla la ley, pudiendo ordenar el cese o traslado de la actividad y las medidas de protección, limpieza y restauración que correspondan".
Las diferencias, que marcaban la divisoria de opiniones entre los proyectos en danza se centraban en dos artículos, el 2 y el 15, modificados en la Cámara de Diputados, después que Filmus decidiera retirar del dictamen el apoyo al artículo 17, que obligaba a las empresas a esperar el pronunciamiento de un organismo nacional, el Instituto Argentino de Niveología, Glaciología y Ciencias Ambientales (Ianiglia), antes de recibir la autorización para sus iniciativas.
El artículo 2 establece la definición y el alcance de un glaciar y su zona adyacente: la sancionada por el Senado el año pasado establece condiciones menos restrictivas para la actividad minera como la reelaborada por al cámara baja. La segunda diferencia, la del artículo 15, en la versión del Senado, no se establecían plazos concretos para efectuar los inventarios y las auditorías contempladas por la legislación, en tanto la versión de Diputados pone un límite de 180 días.