Este domingo se terminará de pintar casi por completo el mapa de las provincias, con Salta como la última incógnita, que se develará el 10 de noviembre. Durante 2019, Juntos por el Cambio puso en juego cuatro de los cinco distritos que controlaba, ya que Corrientes no elige gobernador en este turno electoral.
Jujuy y Mendoza lograron continuar con la línea de Cambiemos, y hoy tendrá los desafíos de la Ciudad de Buenos Aires, con Horacio Rodríguez Larreta en su intento de reelección, y en la provincia de Buenos Aires con María Eugenia Vidal, que resultó derrotada en las PASO por más de 16 puntos frente a Axel Kicillof.
Por el lado del Frente de Todos, ya tiene 13 provincias bajo su control con las reelecciones de Gildo Insfrán (Formosa), Gustavo Bordet (Entre Ríos), Alberto Rodríguez Saá (San Luis), Sergio Uñac (San Juan), Juan Manzur (Tucumán), Alicia Kirchner (Santa Cruz) y las elecciones de Oscar Herrera Ahuad (Misiones), Gustavo Melella (Tierra del Fuego), Sergio Ziliotto (La Pampa), Omar Perotti (Santa Fe), Jorge Capitanich (Chaco), Mariano Arcioni (Chubut) y la continuidad de Gerardo Zamora en Santiago del Estero.
Alberto está convencido del triunfo y se prepara para la transición
Además de Buenos Aires, podría sumar a Catamarca y La Rioja, que también eligen gobernador, por lo que las provincias gobernadas por el Frente de Todos llegarían a 16.
Por último, tres provincias se mantienen por fuera de los dos ejes mayoritarios. Tal es el caso de Juan Schiaretti en Córdoba, quien evitó pronunciarse por Alberto Fernández más allá de su filiación peronista. En Neuquén, Omar Gutiérrez, del MPN, también esquivó el encasillamiento pese a algunos acercamientos con Mauricio Macri. Y en Río Negro llegará Arabela Carreras, como sucesora de Alberto Weretilneck, quien también prefiere mantener una postura alejada de la grieta.