En la conferencia de prensa de ayer de Néstor Kirchner, cambió en alguna medida el "paisaje" de dirigentes políticos sentados en torno al "ex presidente en funciones", como lo define el doctor Nelson Castro.
La ausencia de Daniel Scioli, manteniendo candentes charlas en la Universidad de Bologna, en Italia, la suplió su vice, Alberto Balestrini, que, con las cantidad de veces en que se río, demostró que el humor del ex presidente le resulta desopilante. A la izquierda, como en la conferencia de prensa de junio, estuvo Hugo Moyano, y luego se acomodaron el ministro del Interior, Florencio Randazzo; el titular provisional del Senado, José Pampuro; y el intendente de Ituzaingó, Alberto Descalzo.
En la fila de sillas siguiente, se ubicaron el diputado Carlos Kunkel, el secretario General de la Presidencia Oscar Parrilli, el legislador bonaerense; el intendente de Quilmes Francisco Barba Gutiérrez; Graciela Giannettasio; el gobernador mendocino Celso Jaque, el dirigente Emilio Pérsico y el joven K Juan Cabandié.
En la conferencia de junio, justo detrás de Kirchner había estado el taxista Omar Viviani, cuyas risotadas provocaron críticas. En esta ocasión, fue prolijamente "borrado" de ese lugar que luego aparece en todas las fotos.